Nuria Fontdecaba es de Barcelona (España), estudió Magisterio y tiene 30 años. En 2019 se reunía para orar con su marido, Javier, y un grupo de amigos, en la parroquia de Santa Inés de Barcelona. En ese ambiente de "conexión total con el cielo" descubrió que tenía que embarcarse en una misión muy especial: crear una marca de ropa atractiva y juvenil para llevar a Dios a todos los rincones.
"The Heaven Lift surge en una parroquia de Barcelona gracias a un grupo de amigos. Nosotros hacíamos oración todas las semanas y nos reuníamos en una sala, que habíamos decorado genial, que decíamos que era como un ascensor (lift, en inglés). Un lugar en el que estábamos en conexión siempre con el cielo y con mucha paz", comenta a Religión en Libertad (puedes entrar en su web para conocer más sobre la marca).
Llevar a Cristo... siempre unidos
"Por ese tiempo tenía una fuerte llamada a evangelizar y, junto a mi marido, que le gusta mucho la moda, pensamos en hacer ropa atractiva para los jóvenes. Empezamos Javi, un par de amigos y yo... estampando un par de sudaderas y abriendo un Instagram. Nos dijimos: ¿por qué no intentarlo?, si Dios bendice este proyecto, tendrá sus frutos", añade Nuria, casada con Javier desde hace siete años.
Un tiempo después, pusieron en marcha esta idea un poco loca y ahora "no paran de recibir regalos del cielo y de crecer". "Queremos que nuestras prendas tengan un sentido que vaya más allá de la moda, es un llevar a Cristo, incluso en tu ropa, y un mostrarse unidos con el resto de cristianos", comenta Nuria, que hace un mes dejó el colegio en el que trabajaba y ahora dedica su tiempo a la evangelización.
Para la emprendedora es muy importante que la Iglesia recupere el gusto por la belleza en todo lo que hace. "Igual que cuidamos los pequeños detalles en la liturgia, nosotros tenemos que cuidar la belleza del ser cristianos. Y esa belleza es una mirada. Se reconoce a un cristiano por cómo mira, por cómo se expresa... en eso vemos que hay algo más grande detrás", afirma.
El 100% del dinero que sacan de cada producto -sudaderas, camisetas, gorras, calcetines...- va destinado a financiar proyectos de evangelización. "Nosotros nos llamamos los becarios, porque nuestro gran jefe es Dios", comenta Nuria, que lleva la parte de organización, mientras su marido se encarga de la parte financiera. Ana diseña, Guillem ayuda con los vídeos, y Edu y Almu llevan la comunicación (su cuenta de Instagram tiene más de 11.000 seguidores, entra aquí para verla).
"Tenemos dos líneas de acción, por una lado hacemos colaboraciones con otras marcas y, por otro, tenemos nuestras propias prendas. Como hace la moda, que cambia por temporadas... durante un año nuestra ropa está inspirada en algo relacionado con la fe. El año pasado, el tema fue el 'himno a la caridad', de San Pablo, y este año decidimos hacerlo sobre 'las bienaventuranzas'", explica Nuria.
Frases que tocan a la gente
"God is good all the time" ("Dios es bueno todo el rato"), "Awake my soul" ("Despierta mi alma") o "Child of God" ("Hijo de Dios")... son solo algunas de las frases que se pueden leer en la ropa de The Heaven Lift.
"La gente nos cuenta experiencias de evangelización que han tenido con nuestra ropa. Hace poco, una chica nos contó que estaba en una iglesia con una sudadera que ponía 'confía' y un texto... se le acercó una persona por detrás y le dio las gracias, decía que necesitaba leer esas frases. Estaba con mucha desesperanza y aquello le ayudó a confiar más en Dios. Es muy bonito cuando dos personas que llevan prendas de 'Lift' se identifican y se ponen a hablar sin conocerse, ves que hay algo más grande que les une", relata Nuria.
Con iniciativas como la suya, la joven cree que está habiendo un renacer de la juventud católica, que se pone en marcha sin complejos. "Es bueno que los jóvenes quieran emprender y renovar, y sin perder de vista lo central, que es Dios. Vivimos en una época en la que los jóvenes no tienen miedo a expresar lo que piensan, los que llevan este tipo de ropas están tan convencidos de que hay algo real ahí, de que hay una verdad en ese mensaje", asegura.
Una idea que está muy relacionada con los mensajes que suele dar el Papa a la juventud. Precisamente, en el 2020, parte del equipo de The Heaven Lift, varios jóvenes de la parroquia de Monestir de Sant Cugat y el sacerdote Álex Serra, delegado de jóvenes de la diócesis de Terrasa, acudieron a Roma y le entregaron una gorra a Francisco, que no dudó en ponerse.
"Fue un encuentro muy cercano para todos los jóvenes, era simplemente estar en la sencillez y decir que ahí estábamos, viviendo la fe en comunidad. Solo escuchar al Papa, que dice que hagamos lío, ya aviva muchos corazones", reconoce.
Una de las publicaciones que comparten en su cuenta de Instagram.
Nuria termina con el mensaje que le gustaría dar a todos aquellos que llevan su ropa. "Vivir una vida con Dios vale la pena. Abandonarse y confiar en sus planes, vale la pena. Porque la vida en Cristo es lo que te da la verdadera alegría. Nos gustaría que todo el mundo llevara nuestra ropa, pero el verdadero sueño, al final, es que la gente tenga la oportunidad de conocer a Cristo. Si podemos alentar a los jóvenes a que lleven ese mensaje, con eso nos vale", concluye.