El fútbol es el deporte más practicado en todo el mundo. En cualquier rincón de los cinco continentes siempre hay alguien pegando una patada a una pelota. Así fue como surgió la oportunidad de evangelizar aprovechando este deporte.
Esta iniciativa ha surgido en calles de Brasil, donde el fútbol es una pasión. En Brasilia, dos jóvenes sacerdotes desafían a los transeúntes a jugar una partida de fútbol y utilizan esta oportunidad para evangelizar.
Tal y como recoge Aci Digital, el padre Luis Fernando Costa y el padre Eder Monega lanzaron la iniciativa “Desafíe al Padre” en el 2013. La idea se le ocurrió a Costa durante la Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro que se realizó ese mismo año. Hasta la fecha nadie ha logrado vencerlos en su desafío.
Ambos alquilan una pista deportiva y retan a los transeúntes a jugar una partida de “futvoley”, una fusión entre fútbol y vóley, aunque con algunas reglas propias: el vencedor debe rezar por quienes perdieron la disputa.
Explicaron que tienen esta norma para demostrar que “rezar nunca es un castigo”, sino que “siempre es una recompensa”. En este desafío el vencedor siempre es el padre Costa, quien debido a su destreza con el balón es apodado como el “Padre Toni Kroos”, en referencia al jugador alemán del Real Madrid, a quien el sacerdote se parece físicamente.
Además, el padre Costa ha sido campeón de la Clericus Cup 2017 –la versión de la copa mundial de fútbol para los seminaristas que estudian en Roma– que disputó junto con el Pontificio Colegio Pio Brasileño.
El presbítero confiesa que se siente “inmensamente feliz de poder evangelizar de esa forma”. “El mundo de hoy necesita nuevas formas de evangelización y el fútbol une corazones, y ahora también puede unir credos”, expresó.
“Desafíe al Padre” se ha aplicado desde el año 2013 en Roma, donde el P. Costa estudió, y en Austria y Polonia durante la Jornada Mundial de la Juventud de 2016.
En el programa Globo Esporte, Costa contó que el Papa Francisco conoce su iniciativa y que la aprobó. Dijo que cuando se encontró con el Pontífice, este afirmó que “el fútbol es muy importante, esa también es una forma de evangelizar”.