El pasado fin de semana la Catholic University of America (CUA), confirió a Francisco Gómez de Argüello Witz (Kiko) y a María del Carmen Hernández Barreda, iniciadores del Camino Neocatecumenal, el doctorado honoris causa en Teología.
En el acto de entrega, el sábado 16 de mayo, el Presidente de la Universidad leyó una breve biografía sobre los dos iniciadores del Camino.
«“Kiko” Argüello nació en León, España, en 1939. Siendo un artista muy respetado, a mediados de los años 60, se fue a vivir entre los pobres de Palomeras Altas, un suburbio de las afueras de Madrid, llevando consigo sólo la guitarra, un crucifijo, la Biblia, y un saco de dormir. Su camino hasta el suelo de tierra de una barraca de madera en el suburbio comenzó en la Real Academia de San Fernando, donde en 1959 había sido galardonado con el Premio Nacional Extraordinario de Pintura. Pero se dio cuenta de que la fama no significaba nada para él. Pasó a través de una conversión y comenzó estudios catequéticos. Con el tiempo, llegó a creer que Cristo está presente en el sufrimiento de los más pobres y dejó sus estudios para vivir entre ellos».
«Carmen Hernández, licenciada en química y teología, que había nacido en Ólvega, España, ya estaba viviendo entre los pobres para llevarles la palabra de Dios. Argüello se encontró con Hernández y juntos desarrollaron un estilo de predicación que llegaba profundamente a los pobres con los cuales estaban viviendo. Formaron una pequeña comunidad cristiana, compuesta de gitanos, analfabetos, vagabundos, prostitutas y gente sin empleo, a los que llevaron a la conversión a través del descubrimiento de que Cristo los amaba a pesar de sus pecados y su estilo marginal de vida. A través del contacto con otras parroquias y acogiendo personas que vivían en circunstancias difíciles, poco a poco comenzó un camino de iniciación cristiana para adultos que iban descubriendo las riquezas de su bautismo. Así nació el Camino Neocatecumenal, conocido simplemente como “El Camino”».
Por tanto, “debido a su dedicación a los pobres, que ha conducido a tantos a la comunión con Cristo y la fe Católica, la Universidad Católica de América se complace en otorgar a Francisco José Gómez de Argüello y Wirtz y María Carmen Hernández Barreda el grado de Doctor en Teología, honoris causa, otorgado a cada uno de ellos individualmente”.
La decisión tiene una especial relevancia como reconocimiento a la obra de Kiko y Carmen a través del Camino Neocatecumenal en los Estados Unidos y en el mundo, puesto que la UCA es la única universidad Pontificia en los Estados Unidos y funciona bajo la directa supervisión de la Conferencia Episcopal Estadounidense y de la Santa Sede.
Los doctorados honoris causa para Kiko y Carmen fueron propuestos ya hace algunos años y han sido decididos recientemente después del encuentro del Papa Francisco con el Camino Neocatecumenal el 6 de marzo pasado, cuando el Pontífice –al enviar 250 familias en misión– definió el Camino como “un verdadero don de la Providencia a la Iglesia de nuestros tiempos”.
El cardenal Wuerl de Washington, a la izquierda; con él, las autoridades universitarias de la UCA con Kiko y Carmen
Honoris causa en Roma (Italia) y Lublín (Polonia)
Kiko recibió el doctorado honoris causa del Instituto Juan Pablo II de Roma en 2009. En la laudatio del Prof. José Noriega, la decisión vino motivada sobre todo por el hecho de que “en un momento de crisis y desorientación por parte de muchos, la acogida sin reservas de la encíclica profética de Pablo VI Humanae Vitae por parte de las familias del Camino ha sido un auténtico testimonio para toda la Iglesia”; el Camino, además, ha “abierto una vía para reintroducir en la familia una liturgia doméstica para transmitir la fe a las nuevas generaciones”; y finalmente porque “en el contexto de la secularización de grandes zonas de la tierra en las que la fe está en peligro de apagarse como una llama que no encuentra donde nutrirse”, el Camino Neocatecumenal ha sabido “hacer presente a Dios de un modo singular (....) a través del testimonio de las familias en misión (missio ad gentes)”.
En 2013, Kiko recibió el doctorado en Teología también por la Universidad de Lublín (Polonia) por haber “iniciado una formación espiritual post baustimal, llamada universalmente Camino Neocatecumenal, excepcionalmente preciosa para el mundo contemporáneo que, con forma de iniciación cristiana, lleva a todo el mundo una acción evangelizadora”. En la laudatio, el Prof. Stanisław T. Zarzycki presentó a Kiko “como un profeta de nuestro tiempo”.
La concesión del honoris causa a Carmen subraya su contribución fundamental a la formación de la síntesis teológico-catequética del Camino: sin su conocimiento existencial y profundo de la Escritura, de la renovación del Concilio Vaticano II y de la historia de la Iglesia, no se habría podido crear este itinerario de iniciación cristiana.
El Camino Neocatecumenal está difundido hoy en todo el mundo con cerca de un millón y medio de participantes en 125 naciones en los seis continentes con más de 30.000 comunidades. Kiko y Carmen, junto al Padre Mario Pezzi, forman el Equipo Responsable del Camino a nivel internacional.