Ha fallecido con 92 años mosén Alimbau, uno de los autores de best-sellers religiosos más relevantes en España. Títulos como Palabras para el silencio, Vive mejor tu vida, Palabras para el sufrimiento, Saber sufrir o Palabras para momentos difíciles, son algunos de los libros que estuvieron en el ránking de los más vendidos.  

Con un modelo comunicativo propio y original, Josep Maria Alimbau Argila llevaba décadas dando esperanza a miles de personas gracias a sus breves artículos que publicaba en el Full Dominical , la hoja dominical de las diócesis catalanas de Barcelona, Lérida, Sant Feliu, Terrassa, Tortosa y Urgell, que cuenta con una tirada que supera los 100.000 ejemplares semanales.

Además, durante casi 10 años también tuvo una columna semanal de opinión en el diario La Razón, dentro del suplemento religioso Fe y Razón. En 2015 se incorporó a Religión en Libertad con su blog Vive Mejor, siendo su primer artículo "¡Vacíame de mi… y lléname de Ti, Jesús!". 

Con la ayuda de Elisabeth, su fiel secretaria, Alimbau estuvo trabajando una media de ocho a diez horas diarias, hasta pocos meses antes de su fallecimiento, y siempre de buen humor, con una actitud vital positiva y con una confianza plena en que Dios le cuidaba y le proveía de lo necesario.

La diócesis de Barcelona comunica que habrá vigilia de sus restos en la tarde del 3 de octubre a las 15h en el Tanatorio de Les Corts. La misa exequial se llevará a cabo el miércoles  de octubre, a las 10 horas, en la capilla de la Residencia Sacerdotal Sant Josep Oriol.

Última edición de 'Dios convierte los males en bienes', un libro con los grandes temas de mosén Alimbau, a partir de la imagen de José y sus hermanos en Egipto: Dios obtiene cosas buenas para nosotros que no sabemos ni imaginar. (Puede conseguirse aquí).

En su última entrevista concedida a Religión en Libertad con motivo de la publicación de su libro, en diciembre de 2022, se le preguntó: “Mossèn Alimbau, en su atalaya vital de los 91 años, ¿cómo se prepara para la muerte?”. “Viviendo la vida al cien por cien de cada día, que es lo mejor que tenemos”, fue su respuesta. 

50 años con un programa en la Cadena SER

Los escritos de J. M. Alimbau tenían tanta aceptación, que lograron reunir a su alrededor una gran familia de lectores que esperaban con fruición sus reflexiones semanales, así como sus libros, la mayoría de ellos convertidos en best-seller.

Licenciado en Teología y sacerdote de la diócesis de Barcelona, fue el colaborador más veterano de Radio Barcelona (SER) al mantener en antena durante 50 años el programa: 'Objetivo, el hombre'.

Todos los domingos, a las diez de la noche, se asomaba este programa que tenía tanta audiencia, que los responsables de la Cadena Ser, a pesar de tener una cosmovisión muy diferente a la de mossèn Alimbau, lo consideran imprescindible para su parrilla de programación. En ese espacio radiofónico la solidaridad y amor al prójimo tenía un gran peso, pero todo ello traspasado por el amor cristiano del Evangelio. 

Libros de espiritualidad animosa de mosén Josep Maria Alimbau; daba herramientas sencillas para vivir con alegría en la adversidad, con agradecimiento a Dios (pueden conseguirse aquí).

Tres Premios Bravo

Su gran humanidad y simpatía, unidas a su buen hacer y profesionalidad, han sido cualidades decisivas para que le concedieran en 1971 el Premio Bravo, "a los hombres que unen", de Barcelona; en 1981 el Premio Bravo de Cataluña, y en 1991 el mismo premio concedido por la Conferencia Episcopal Española. Asimismo, es poseedor de la medalla de Plata concedida por el Instituto de Teología Espiritual de Barcelona, hermanado con el  “Teresianum” de Roma, por sus escritos.

Colaboró en el periódico El Noticiero Universal durante doce años y fue subdelegado de la Delegación General de Medios de Comunicación Social del Arzobispado de Barcelona, además de director de la revista Apostolado Sacerdotal y del Boletín Oficial de ese arzobispado. Fue cofundador de los cursillos de Cristiandad en Lucerna (Suiza). 

Con motivo de la edición de su libro Saber sufrir (Voz de Papel), manifestaba a Religión en Libertad la necesidad de “implantar en las escuelas una asignatura que enseñe a saber sufrir: los niños deben adiestrarse ante el dolor”.

Alimbau no era ningún teórico: sabía lo que era la enfermedad, el sufrimiento y el dolor por experiencia propia. De niño padeció acetona. De joven, en el Seminario de Barcelona, cogió un tifus a los 18 años, además de otras muchas enfermedades que se presentaron a lo largo de su vida. Consideraba que “se debería enseñar en nuestras escuelas, preparar a los niños y adolescentes para hacer frente y superar los problemas de la vida. Lo primero que diría es que uno debe aprender un arte: el arte de sufrir. El arte de adiestrarse para superar el sufrimiento, el dolor, y trascenderlo. ¿Cómo curtirse uno en el dolor, en el sufrimiento y adiestrarse para momentos difíciles? Costará trabajo, porque nadie quiere sufrir voluntariamente ni ir en busca de la cruz, pero sí que puede educarse la voluntad con seriedad, con austeridad, espiritualidad, con espíritu de sacrificio y con el seguimiento a Jesús Crucificado con y por amor y llegar a ser una persona madura”. 

Alimbau recordaba que “lo que se acepta nos cambia el sentido de la vida, y desaparece el problema en un 80%. Quiero insistir en este mensaje de que es muy importante: Saber aceptar… lo adverso, difícil y complicado para poder llevar una vida soportable y mejor”.

En su último libro, publicado en 2022, Dios convierte los males en bienes (VozdePapel), Alimbau señalaba que “sufrimos mucho porque ambicionamos mucho. Cuando dejes de desear, de ambicionar tanto, entonces lo entenderás todo…. vivirás más feliz».