Diez, nueve, ocho, siete, seis… un ejército de jóvenes de varios países entona la cuenta atrás y se inicia en la abadía de Montserrat el Encuentro Europeo de LifeTeen , un método de catequesis para adolescentes que llegó a España en 2011 y ya está implantado en más de 150 parroquias.
"Que estéis hoy aquí es una esperanza para toda la Iglesia", dice el vídeo de acogida de la organización. Entre los asistentes hay catequistas, sacerdotes y religiosos, se les nota entusiasmo y ganas de "mirar siempre adelante". Ese el lema del encuentro, que se desarrolla de viernes a domingo.
"Es un momento histórico, es el mayor encuentro de catequistas de LifeTeen que se hace fuera de Estados Unidos", anuncia el norteamericano Randy Raus, responsable internacional de LifeTeen. Han venido casi 380 personas de diferentes países de Europa.
Jordi Massegú, el impulsor de LifeTeen en España, aprovecha para preguntar cuántos vienen por primera vez al encuentro, y levanta la mano más de la mitad.
"Sí, LifeTeen funciona, los chicos no quieren irse"
En Montserrat estos días, además de los hábitos de los benedictinos anfitriones, se ven hábitos de muchos otros colores, camisas de cura diferentes, chavales jóvenes, gente de mediana edad, más mayor, incluso alguna pareja de catequistas con un bebé…
Hablamos con Juan y Abel, frailes franciscanos conventuales que visten de gris. Han venido desde Madrid para el encuentro. Hace siete años llegaron a tirar la toalla, desanimados al ver que una veintena de chicos sin ganas asistía a las catequesis de su parroquia.
Pero empezaron a aplicar LifeTeen y ahora tienen dos grupos de 70 adolescentes cada uno, acompañados por muchos catequistas jóvenes.
"LifeTeen nos ha cambiado la visión, tiene una estructura y unos documentos muy buenos", comenta Juan. "La pista de que funciona es que ¡hay que echar a los chicos! Casi siempre se quieren quedar más rato y hay que decirles que hay que descansar. Eso es una bendición", dice Abel. Le alegra que los adolescentes tengan por fin una herramienta que les ayude en "un mundo tan complicado".
Esos adolescentes, además, invitan a otros. "Traen a sus amigos, incluso ha llegado a venir gente de otras religiones, que participaba en la adoración y todo… Los padres de los chicos están encantados, antes los veían siempre jugar a videojuegos o perdidos por la calle, y ahora dicen que no salen de la parroquia", apunta fray Abel.
Casi la mitad de los chicos que asiste a LifeTeen en la parroquia y en el colegio de Juan y Abel no pertenecían antes a familias practicantes. Ahora, en cambio, no se pierden una misa de domingo ni los encuentros mensuales de los jóvenes en la catedral de Madrid con el obispo.
Catequistas con fervor que acompañan de cerca
LifeTeen no se hace "para la confirmación", sino para crear un ambiente adolescente alternativo, alegre, de amistad y fe, con centralidad de la adoración eucarística, la formación, la música de alabanza y adoración y el acompañamiento cercano de los catequistas.
Los párrocos españoles suelen agradecer que los temas y materiales de las catequesis de LifeTeen son muy buenos y útiles incluso para catequesis de adultos. Con esos materiales, jóvenes adultos fervorosos pueden hacer buenas catequesis sin necesidad de tener mucha formación. Lo más importante siempre, defienden, es crear lazos en Dios con los demás.
Muchos catequistas que se ven estos días en Montserrat son jóvenes pero veteranos: acudieron de adolescentes a LifeTeen y luego se convirtieron ellos en catequistas. Otros se hicieron catequistas sin saber nada de LifeTeen. Un tercer grupo serían los "muy interesados", personas que quieren conocer de qué se trata para ver cómo lo pueden aplicar en sus parroquias.
Entre estos últimos, se encuentran en Montserrat cuatro catequistas llegados desde la localidad de Petra, en Mallorca (España). Son dos adultos y dos jóvenes de veintipocos años. Uno de ellos ya participó el año pasado, y quedó realmente fascinado. "No he podido dormir de lo vibrante que está siendo", comenta una de ellas tras la primera noche.
Hablamos también con Julio, de 20 años. Lleva tres años como catequista. Aunque es de Málaga, vive en un colegio mayor de Madrid. En la parroquia de al lado había LifeTeen y cuando se lo presentaron no dudó en apuntarse. Ha venido con todo su equipo a Barcelona: dos monjas de la familia salesiana, un sacerdote y seis jóvenes catequistas.
"Se aprende mucho de los adolescentes y sobre todo que nos ayudan a nosotros mismos. Recuerdo a un chico que daba un poco de miedo por su estética, siempre aparecía con sus amigos, él entraba un rato y sus amigos se quedaban fuera", comenta Julio, uno de los encargados de los cuarenta adolescentes de LifeTeen de la parroquia.
Álex hace fotos todo el tiempo con una sonrisa en el rostro. Se casa en abril con una chica que "prácticamente" conoció en LifeTeen. Después de llevar una vida lejos de Dios, volvió a la Iglesia hace apenas dos años, gracias, precisamente, a una adoración de LifeTeen a la que le invitaron. "Los chavales tienen un corazón sencillo y eso nos ayuda a todos", comenta el joven, que también participa en los campamentos que se organizan en verano.
Jordi Massegú es el impulsor de LifeTeen en España, presentándolo en docenas de parroquias.
Las claves de LifeTeen, según Randy Raus
Randy Raus, norteamericano y presidente internacional de LifeTeen, imparte la primera charla. Es un laico, que lleva 35 años casado y es padre de ocho hijos. Es católico converso: de joven era protestante poco devoto (lea aquí su historia de fe). Se hizo católico porque una chica le invitó a misa.
"Nuestra misión es acercar a los jóvenes a Cristo, que se sientan amados por Dios y por la Iglesia, están hambrientos de conocerlo", comienza.
"Los catequistas no son voluntarios, ellos 'solo' están siguiendo la llamada bautismal. Todos estamos llamados a ser otro Cristo. Lo bueno de LifeTeen es que no está centrado todo en una persona, sino en el equipo. Si alguien no puede ir, va otro, no pasa nada", explica Randy.
"¿Y cómo conseguimos catequistas? Lo primero es rezar, pedir por los catequistas. Cuando empezamos en esto, mi mujer y yo íbamos a nuestros amigos católicos y les pedíamos que nos ayudaran, aunque fuera solo un año, y luego aquello les transformaba la vida. Es muy importante que los catequistas, más que activos, sean auténticos. El joven va a acercarse a la persona que le escuche, y entonces podrás hablarle de Dios", añade.
"Es importante que los líderes de la parroquia estén siempre detrás con nosotros. Habrá jóvenes difíciles, tormentas, gente que esté buscando a Jesús y que esté metida en muchos problemas, de adicciones... Si trabajamos con ellos, entonces puede que nos ensuciemos con el rebaño, como dice el Papa Francisco. Si construimos la casa en la roca, pasaremos todas esas tormentas", afirma Randy.
"Una vez un chico me dijo que tenía ideas suicidas, y yo se lo tuve que contar al sacerdote y a sus padres. El padre dijo que éramos los peores catequistas que había visto, pero, en ese momento, el sacerdote dio la cara por nosotros... Hace siete años, me llegó una solicitud de una red social, y era aquel chico. Había pasado la tormenta y se había dado cuenta de que quería devolver todo el amor recibido. Esto pasa cuando los sacerdotes están detrás de los catequistas", reconoce el responsable internacional.
100% catecismo, nada de doctrinas aguadas
"Lo que nosotros ofrecemos es 100% Catecismo, doctrina sólida… Nos dimos cuenta de que muchas de las catequesis que se daban normalmente eran como clases de colegio. Los chicos vienen a la Iglesia y encuentran enseñanzas aguadas. No es que rechacen los dogmas sino que ven que la propia Iglesia no se cree lo que dice", apunta Raus.
"Nos contaban que en una parroquia con 300 jóvenes no se perdía nadie la misa. Es importante que la música sea vibrante, aunque no todas las canciones sean de dar palmas. Los jóvenes quieren vivir la liturgia, están hambrientos de la Eucaristía. Al principio, en mi parroquia no fue fácil, pero se fue creando una comunidad muy bella en torno a la misa de seis. Cuando hacemos algo por los jóvenes, ellos siempre responden. Si conseguimos llegar a los jóvenes, los adultos van a escuchar el doble", asegura Randy.
Oportunidades para el encuentro con Cristo
"Los jóvenes siempre recuerdan la atmósfera que se crea cuando el Santísimo aparece. Nosotros vimos que algunos chicos iban después de LifeTeen a encuentros protestantes, en los que había música, alabanza… Decidimos ir a a estos grupos a ver y pensamos que le faltaba lo más importante, el Santísimo Sacramento", explica.
"Una vez me encontré con la Madre Teresa, que conocía LifeTeen, y le pregunté que qué podíamos hacer por los jóvenes. Ella me contestó que atraerlos a la Eucaristía y a la adoración, y eso hacemos. No somos el Salvador, le damos el mapa a los chicos para que puedan tener un encuentro poderoso con Él en su vida. Además, nosotros tampoco podemos parar de tener encuentros con el Señor, nunca nos deberían parecer suficientes", concluye.
LifeTeen ya se ha consolidado en España y llega cada vez a más parroquias que quieren que los adolescentes vivan la fe y perseveren en ella con alegría.
Cualquier parroquia interesada puede contactar para saber más en https://www.lifeteen.es.
(Fotos del estudio Alex Pozuelo para LifeTeen)
En el vídeo, una exhortación de ánimo de LifeTeen para catequistas, sacerdotes y evangelizadores tentados de desanimarse: "No te detengas".