Este jueves por la tarde se celebró en el auditorio de la parroquia de Santa María del Monte Carmelo de Madrid la gala de la I Edición de los Premios Religión en Libertad. Casi 150 personas abarrotaron la sala en un acto que reconoció a personalidades que de forma pública y valiente han defendido y promovido la fe católica, que han sacado adelante obras evangelizadoras y caritativas o que a través de la cultura, la educación o la ciencia divulgan el pensamiento cristiano.

El acto fue organizado por la Fundación Nueva Evangelización, editora del portal religioso que da nombre a los premios, y entregó los distintos galardones: Alfonso Coronel de Palma (Premio ‘Especial del Año’ a título póstumo); el empresario Miguel Ángel Robles (Premio ‘Letras Breves’); el científico del CSIC, Alfonso V. Carrascosa (Premio ‘Ciencia y Fe’); el escritor Juan Manuel de Prada (Premio ‘Audacia ante el Mundo’); el sacerdote Ignacio María Doñoro y su Hogar Nazaret (Premio ‘Impulso Misionero’); la Fundación Educatio Servanda (Premio ‘Educación Integral’); el director de cine Pablo Moreno (Premio ‘Artes de la Imagen’); la escritora e historiadora María Elvira Roca ( Premio ‘Buenas Letras’); la Comunidad Fe y Vida (Premio ‘Nueva Evangelización’); la Parroquia San Ramón Nonato del barrio de Vallecas (Premio ‘Caridad en Acción’); y por último el grupo Hakuna (Premio ‘Música Católica’).

Durante la ceremonia, que fue conducida por Álex Navajas y Sandra Segimón, no faltaron momentos emotivos, especialmente con la entrega del reconocimiento al difunto Alfonso Coronel de Palma, que fue presidente de la Asociación Católica de Propagandistas y presidente de las Universidades San Pablo CEU, que falleció repentinamente el pasado mes de febrero a los 54 años.

Álex Rosal, director de ReL, entrega el premio a Merche de la Mata, viuda de Alfonso Coronel de Palma

Su viuda, Merche de la Mata, acudió acompañada de sus seis hijos, y visiblemente emocionada recogió el premio. “Os miro, no os veo, os miro con el corazón, donde guardo a mi marido, a mis hijos, a sus padres, a los míos, a mis amigos queridos que están aquí, que siempre hacen todo más fácil. Gracias de corazón”, expresó entre lágrimas al recoger este reconocimiento a la vida y obra de su esposo.

El segundo de los premios se entregó al periodista y empresario Miguel Ángel Robles, reconocido por su artículo “Reza por mí” que publicó en las páginas del ABC Sevilla, y que se hizo viral. Al recoger el Premio ‘Letras Breves’ este sevillano dijo que si su artículo se leyó es porque todavía hoy hay mucha gente que reza y cree, pese a que estén intentando silenciar y arrinconar al cristianismo. “Querría invitar a todos los creyentes a que salgamos a la calle a reconocer y defender, sin altanería pero sin miedo” dijo el premiado, los valores cristianos siendo conscientes de que si no se hace “acabarán siendo más residuales” en la sociedad.

Miguel Ángel Robles, premio 'Letras Breves' y detrás de él, Álex Navajas, uno de los presentadores de la gala

Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC, recibió el Premio ‘Ciencia y Fe’ por su labor de divulgación dando a conocer numerosos casos de científicos católicos, sobre todo españoles, y la compatibilidad entre la tarea científica y el cristianismo. Este doctor en Ciencias Biológicas afirmó que este galardón le anima “a seguir adelante, a escribir sobre hechos concretos, que demuestren que ciencia y fe son compatibles en personas”.

Alfonso V. Carrascosa, premio Ciencia y Fe

Por su parte, el escritor y columnista Juan Manuel de Prada expresó su gratitud por el Premio ‘Audacia ante el mundo’, entregado por su importante labor de crear cultura católica a través de sus escritos y por sus recientes debates con los ideólogos de Podemos, a los que les muestra con valentía la fe católica. “En estas ‘periferias’, es irónico y divertido, uno encuentra a gente generosa y abierta como estos compañeros de Podemos que han sentido curiosidad por mis tesis y han querido confrontarlas”, explicó el ganador del Premio Planeta en 1997.

Juan Manuel de Prada sacó una sonrisa a los presentes con su intervención

El padre Ignacio María Doñoro, sacerdote vasco y capellán castrense, vive ahora en la selva del Amazonas en Perú realizando su gran sueño, el Hogar Nazaret. Primero en distintas misiones internacionales y también en el País Vasco vio en primera persona el sufrimiento de los niños víctimas de la violencia, la injusticia o el terrorismo. Esto le llevó a dejar todo para crear, jugándose la vida en ello, este centro para niños que estaban abandonados y vulnerables. Por ello recibió el Premio ‘Impulso Misionero’ y en el vídeo que envió para el acto explicó que “Hogar Nazaret es el sueño de Dios que intenta restituir a los niños y niñas los derechos que les han sido arrancados. No solo les da comida, cobijo o estudios, sino que además de esto es una auténtica familia, no nacida de la carne y de la sangre sino del mismo sueño de Dios que está reclamando hombres y mujeres nuevos. Les intentamos dar valores y poco a poco superando nuestras dificultades vamos saliendo”.

Unas 150 personas abarrotaron el salón de actos en el que se celebró la gala

El Premio ‘Educación Integral’ lo recibió la Fundación Educatio Servanda, responsable de los colegios Juan Pablo II, y firme defensora de la libertad educativa y de la educación en la virtud. Su presidente, Juan Carlos Corvera, citó las “minorías creativas” de las que hablaba Benedicto XVI. “Creo que todos somos minorías creativas, somos en cierto modo resistencias desde el mundo de la cultura, de las letras, de la empresa. Que gracias a no tener miedo, como en nuestro caso nos dijo nuestro patrón Juan Pablo II, y gracias a defender un concepto que además está en la cabecera de este digital, libertad, una palabra que nos hilvana a todos nosotros. Gracias a estos dos conceptos, no tener miedo y ser conscientes de que somos libres y de que tenemos que ejercer nuestra libertad con independencia de lo que pueda pasar por hacerlo estamos unidos en esta entrega de premios”, afirmó al recoger el premio.

Iñigo Churruca (izquierda) entrega el premio a Juan Carlos Corvera, presidente de Educatio Servanda

Director de películas católicas como Red de Libertad, Poveda, Luz de Soledad o Un Dios prohibido, Pablo Moreno y su productora Contracorriente recibieron el Premio ‘Artes de la Imagen’. Al recoger este reconocimiento admitió la “valentía” que han tenido para lanzarse a estos proyectos, pero que a la postre les ha llevado a estar muy “contentos”. “Estamos conociendo muchísimos carismas, poder mostrar la pluralidad de la Iglesia, una grandísima riqueza, con todo lo que ha aportado y aporta a la sociedad de hoy. Nos gusta rescatar estas historias”, afirmó Moreno.

Pablo Moreno, normalmente detrás de la cámara, aparece en esta ocasión frente a ella

La escritora malagueña María Elvira Roca fue reconocida en la gala con el Premio ‘Buenas Letras’ por su libro Imperiofobia y Leyenda Negra, todo un fenómeno editorial que desmiente la Leyenda Negra antiespañola y anticatólica. La autora que se declara no creyente reconoció en el vídeo que envió a la gala el cómo los católicos “suelen relacionarse con personas que no tienen las mismas ideas que ellos” y dio las gracias por la valoración de su trabajo a la hora de defender la historia de España y la verdad.

Elvira Roca no pudo asistir al acto al encontrarse en Italia, pero quiso enviar un vídeo de agradecimiento que se proyectó a los presentes

Los invitados en la entrega de premios escucharon con atención los discursos de los premiados

La Comunidad Fe y Vida lleva desde 1996 al servicio del anuncio del Evangelio, sus frutos se van extiendo y su renovación eclesial va llegando a cada vez más parroquias, motivo por el cual se les entregó el Premio ‘Nueva Evangelización’. Luis Priedes, junto a otros miembros de la comunidad, afirmó que este reconocimiento “nos anima a salir. Poca cosa somos, nos vemos como siervos inútiles, pero Dios se empeñó en que en Cantabria surgiese un reducto como los galos, para evangelizar y ser comunidad, y vemos que a la gente le sirve y crece por todos lados”.

Luis Priedes quiso recoger el Premio junto a más miembros de la comunidad

El Premio ‘Caridad en Acción’ se entregó a la Parroquia San Ramón Nonato de Madrid y su Obra Social Álvaro del Portillo. Situada en el humilde barrio de Puente de Vallecas se ha convertido en un ejemplo de cómo la labor social y la evangelizadora van totalmente unidas. El párroco José Manuel Horcajo, explicó al recoger el premio junto a algunos voluntarios que hace “cinco años empezamos con un pequeño comedor en mi despacho, la comida sobrante de un colegio la dábamos en tupper a familias muy necesitadas. Me iba dando cuenta lo que era para esas familias recibir la comida calentita y demás. Tuvimos que ir ampliando y surgió comedor social San José, luego la residencia, el centro de orientación familiar y así hasta 40 proyectos”. Además, contaba que en este tiempo han descubierto que a través de esta obra "entra un pobre y sale un santo, funciona muy bien. Lo que hemos hecho es lo que muchas veces ha dicho el Papa Francisco, que la mayor discriminación es no dar espiritualidad a los pobres, que la están necesitando. Los pobres piden, lo sabemos todos, pero los pobres dan, y dan mucho. A nosotros nos dan mucho. Queremos mostrar a los cientos de voluntarios que realmente han descubierto que alegría es vivir entre los pobres”.

El párroco de San Ramón Nonato, José Manuel Horcajo, junto a algunos de los voluntarios de la parroquia

El último premio, y la nota de color, la pusieron algunos de los integrantes de Hakuna Group Music, jóvenes católicos que hablan de Dios en sus canciones y que cerraron el acto cantando una de ellas. “Queríamos pediros dos cosas. Que recéis por nosotros, igual que nosotros rezamos por esta maravillosa Iglesia, y también pediros a los que no nos habéis escuchado, que nos escuchéis porque creo que os van a gustar muchísimas nuestras canciones. Esto solo es el rumor de una gran revolución”, dijo una de las chicas que compone este grupo.

A recoger el galardón salieron sólo algunos de los miembros de Hakuna Group Music, que hicieron después disfrutar a los presentes improvisando uno de sus temas

Tras acabar la entrega de premios se llevó a cabo un pequeño cóctel en el que los premiados y el público presente pudieron conversar un tiempo e intercambiar opiniones.