Esta procesión se inicia a las tres de la tarde en la parroquia de Santa María de Gracia y finaliza en la Basílica de la Sagrada Familia.
En la Sagrada Familia el cardenal Lluis Martínez Sistach recibirá la imagen y presidirá la misa a las cinco de la tarde.
"Con esta procesión queremos dar testimonio público de nuestra fe, queremos pedir al Santo patriarca por la Iglesia Católica, y por todos los apostolados que los Jóvenes de San José realizarán durante todo este año", explican los Jóvenes de San José en una nota,
"También queremos dar a conocer a San José a personas que quizá no lo conozcan. Pedimos por la reevangelización de Barcelona, por la vuelta de la ciudad de Barcelona a los brazo de Cristo. Queremos que esta ocasión signifique para todos una ocasión para encontrarse con Dios".
Es un momento de oración también "para pedir por todas las personas que están pasando una situación crítica en estos momentos. Queremos pedir por todos nuestros hermanos que viven en las calles, queremos pedir por las familias que lo están pasando mal en lo económico, como en lo moral y religioso, queremos pedir por, el cada vez mayor número de niños con problemas del desnutrición".
Los Jóvenes de San José creen que también es buena ocasión "para para implorar a Dios por la paz en el mundo. Le queremos dar una dimensión internacional, queremos pedir por la paz en el mundo, pero no cualquier paz, sino la paz que trae Cristo, la paz en el orden que da la gracia, la paz de Dios. Queremos que la procesión de San José constituya para los habitantes de Barcelona una ocasión para pedir a Dios a través del Patriarca de la Iglesia, por todas sus intenciones".
La ciudad de Barcelona es mundialmente famosa por el templo de la Sagrada Familia de Gaudí, pero muchos ignoran en Barcelon y fuera de ella- que su edificio más emblemático nació por una devoción a San José.
Cuando Benedicto XVI -que se llama José de nombre de pila- dedicó el templo en su visita a Barcelona recordó: "este templo, desde sus orígenes, ha estado muy vinculado a la figura de San José. Me ha conmovido especialmente la seguridad con la que Gaudí, ante las innumerables dificultades que tuvo que afrontar, exclamaba lleno de confianza en la divina Providencia: ´San José acabará el templo´. Por eso, ahora no deja de ser significativo que sea dedicado por un Papa cuyo nombre de pila es José".
Además, la Sagrada Familia fue consagrada originariamente a la protección de San José, y ese fue el nombre de la primera asociación encargada de edificarla.
Bajo estas líneas, imágenes de la celebración de 2012 (la información del narrador es anticuada, y corresponde a la celebración de 2013).