El próximo 20 de febrero visitará Valladolid Gustavo Entrala, de la agencia Cientuno Comunicación, uno de los artífices de que el Papa Benedicto XVI se uniera a la red social de Twitter bajo el nick de @Pontifex, que acercan lo que sucede en la Santa Sede en diversos idiomas. Con la llegada del Papa Francisco al Vaticano, todas ellas siguen activas y se han convertido en la más seguida de la red. Un ejemplo son los casi cinco millones que siguen la cuenta en español.

- Todo empezó a mediados del año 2009 cuando un amigo me envió una carta de Benedicto XVI en la que el anterior Papa hablaba de la falta de comunicación que había en la Iglesia, todo por un problema que había surgido con las declaraciones de un obispo en una televisión. En la carta el Papa se lamentaba de no haber investigado antes en internet para tener conocimiento de ello. Tras conocer esta información decidí enviar una carta al Vaticano, aunque sin ninguna esperanza de que pasara nada. La sorpresa fue que a los cinco o seis meses recibí una llamada desde Italia y era el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, que nos invitaba a dar un taller de formación o estrategia para la curia romana sobre la comunicación a día de hoy.

- En ese momento desconocíamos cómo se comunicaba la Iglesia, así que les hablamos sobre la relación de las instituciones con los medios, también interesados en casos de crisis por Internet. Es importante transmitir que el mensaje de la iglesia es positivo, aunque sí que es cierto que la gente cuando se cruza con un cura lo primero en lo que piensa es en temas como el matrimonio gay.

- La verdad es que cuando dimos la conferencia nos sorprendió la edad media de los sacerdotes, que oscilaba entre los 35 y 50 años, y los conocimientos tecnológicos que tenían. El problema era que tenían frenos, así que nuestro papel era el de ayudar con la visión del usuario que no viene de la propia iglesia.

- A los meses nos volvieron a llamar y dijeron que en ese taller había surgido crear un portal de comunicación que aglutinase todos las noticias que generase la Santa Sede y como agencia vimos que era importante que todo fuera con un estilo más moderno. En ese portal empezamos a incluir el canal de Flickair, Twitter, Youtube... de hecho hasta rediseñamos el sello papal. Otra opción que vimos fue que todo lo que hace o dice el Papa se filma, lo que nos permitió desarrollar un canal de streaming.
«La Iglesia tenía ganas de participar en el intercambio que permiten las redes sociales»


- En un proceso como este siempre nos encontramos con que el cliente, independientemente de a que se dedique, tiene miedo a dialogar y a estar en las redes sociales. Sin embargo, en la Iglesia había ganas de participar en ese intercambio, estaba interesada en participar en redes sociales como Facebook, aunque siempre cumpliendo unas reglas muy básicas.

-Dentro de nuestro proyecto digital lo que buscábamos era implicar a los altos cargos, de hecho les llegamos a ofrecer camisetas con el logo de news.va para que se comprometieran más y así surgió la posibilidad de que fuese el propio Papa el que presentara el portal. Uno de los temas que nos preocupaban era el de que no apareciese Benedicto XVI con una torre de ordenador, ya que iba a parecer una imagen antigua, por lo que recurrimos a una tablet, aunque era importante para la iglesia que no apareciera ninguna marca. Así llegó el histórico momento en el que el Papa pulsó el botón y publicó su primer tweet.


- El Papa es uno de los personajes más globales. Es difícil acercarse a su nivel de llegada... Hemos hecho una campaña para los Objetivos del Milenio de la ONU que todavía se está implantando en todo el mundo. Es una encuesta mundial para que los ciudadanos indiquen por dónde deberían ir los próximos objetivos de Naciones Unidas. Hemos hecho la campaña global de algunas marcas como J&B y Tanqueray. Y en España hemos hecho cosas con un impacto tremendo...


- Afortunadamente la Santa Sede fue previsora y en vez de hacer una cuenta para Benedicto XVI que fuese B16 decidió poner la de @pontifex para que sirviera a los futuribles papados. Lo más llamativo en ese momento fue que tuvimos que quitar los tweets que había publicados para evitar que los comentarios de Benedicto XVI aparecieran con la cara de Francisco.

-Está muy bien informado sobre lo que pasa en la cuenta, sugiere algunas ideas y redacta personalmente un buen número de los mensajes. No es una persona familiarizada con el uso de la tecnología pero entiende muy bien su utilidad, tiene una perspicacia enorme.

- El equipo que asesora al Papa, en el que los de 101 estamos como consultores informales, está constantemente ideando nuevas ideas. No sólo en Twitter sino en otros soportes digitales. No puedo especificar detalles, pero hay novedades de las que se hablará mucho en los próximos meses.


- Ha sido una experiencia muy gratificante, tanto para mí como para el resto del equipo. Poder ayudar a una institución tan positiva y tan poco comprendida en el mundo actual supone un reto muy interesante. Es un proyecto que me marcará para siempre. También me siento muy orgulloso de que una agencia española haya contribuido a hacer historia de la comunicación. ¡Se puede!