Uno de los obispos de la Iglesia católica austriaca, ante la crisis de fe que vive el país- la Iglesia católica ha perdido más 58.000 fieles en 2011- ha lanzado campaña de promoción muy cinematográfica para suscitar nuevas vocaciones.

´La Misión. El que da todo, recibe todo´,
rezan unos gigantescos carteles que recuerdan a las películas americanas de estilo Hollywood.

Protagonizada por parroquianos, hombres y mujeres, jóvenes y mayores, religiosos y también laicos, estos grandes carteles "muestran a personas de verdad, de nuestra Diócesis, personas que se implican con la Iglesia y que están dispuestos a mostrar su cara a la cámara", dice el obispo Klaus Kung, de la diócesis de Sankt-Pölten (al noroeste de Austria), durante una rueda de prensa.

Más de 400 pósters serán colocadas en esta diócesis, situada en la Baja Austria, uno de los nueve estados federados en los que se divide Austria, y el más poblado después de la capital, Viena.

La campaña, que ha costado 400.000 euros, ha sido financiada por dos bancos austriacos, las antentas locales de Raiffeisen y de Erste Bank.

La Iglesia austriaca ha perdido más de 58.000 fieles en 2011, sobre todo debido a causa de escándalos de abusos sexuales.

"Los oficios de la Iglesia y el compromiso de numerosos laicos han sufrido estos últimos años las consecuencias de una mala imagen", explicaba a la agencia austriaca APA el portavoz de la diócesis, Eduard Habsbourg Lorraine, descenciente de la familia imperial austriaca.