El sacerdote Pierbattista Pizzaballa es el custodio de Tierra Santa. Un cargo que existe desde hace 800 años. Se encarga de cuidar los lugares ligados a la vida de Jesús y de los cristianos que viven allí.
P. Pierbattista Pizzaballa
Custodio de Tierra Santa
“Que los cristianos sean tan pocos y que vivan en una situacíón tan difícil en Tierra Santa hace que sea mucho más difícil mantener la identidad, el carácter cristiano de Tierra Santa y de la población cristana de allí”.
En Palestina y especialmente en la ciudad de Gaza, los cristianos apenas tienen fuerza y representación en la vida civil. En 2007 fue secuestrado y asesinado el propietario de la única librería cristiana de Gaza, acusado de hacer proselitismo cristiano.
P. Pierbattista Pizzaballa
Custodio de Tierra Santa
“Como cada vez tenemos menos visibilidad pública, para los musulmanes somos una realidad cada vez más lejana y artificial. También movimientos islámicos transnacionales influyen en la comunidad musulmana en Tierra Santa, especialmente en Gaza, y hacen que no sea fácil la vida de los cristianos allí. Pero no hay que generalizar. En Gaza no hay persecución directa contra los cristianos”.
Buscando un sitio donde todos sus derechos sean reconocidos y una vida más fácil, muchos de los cristianos deciden arrojar la toalla y abandonar el país. Es el éxodo de cristianos de Tierra Santa.
P. Pierbattista Pizzaballa
Custodio de Tierra Santa
“El conflicto entre Israel y Palestina influye especialmente a las minorías menos protegidas, sobre todo en los cristianos. Este conflicto hace que muchos cristianos se vayan del país buscando una situación mejor que la que tienen en Tierra Santa”.
Según el custode de Tierra Santa, para conseguir normalizar la situación de los cristianos hace falta tiempo y paciencia. Aunque se trata de un problema cada vez más complejo.
P. Pierbattista Pizzaballa
Custode Tierra Santa
“Los cristianos que emigran no son los más pobres, sino los de clase media. Los profesores, abogados, pequeños empresarios, comerciantes... Por lo que la presencia cristiana es cada vez menos visible en la vida pública del país”.
Aunque muchos cristianos emigran de Tierra Santa, también muchos van allí en peregrinación. De hecho, durante los primeros seis meses del año 2010, han pasado por estos lugares santos un millón y medio de turistas, de los que dos tercios son cristianos.
Los peregrinos forman una parte importantísima de Tierra Santa no sólo porque con su presencia recuerdan el caracter cristiano de esta tierra sino también porque crean empleo. Como los cientos de puestos de trabajo que se han creado en Belén con la construcción de cinco hoteles para peregrinos.
Y es que mantener la identidad cristiana en la Tierra de Jesús a pesar de las dificultades es también tarea de los que viven lejos de allí.