En su página web, el Forum Ondara considera que el celibato ha hecho que la Iglesia católica perdiera buenos curas e incluso apunta la posibilidad de que el celibato pueda relacionarse con la pederastia.
«Y, aunque no haya relación -o sí- con el problema del celibato obligatorio y la pederastia, esta legislación ha provocado cosas lo bastante graves para que sea derogada ya -no dentro de 50 años-», reza en la web la crónica de la reunión de sacerdotes del 6 de abril, informa Europa Press.
Relata también que se han perdido muchos curas buenos, preparados y muy pastorales y en cambio, quizás se han aceptado candidatos mediocres que dicen que ya se ven con fuerza de observar esta ley, que siendo obligatoria parece inhumana. «Y muchos jóvenes han huido no solo de no ir al ministerio, sino incluso de la misma Iglesia», agrega.
Josep Alexandre Baró aclaró que los miembros del Fórum Ondara no van contra el celibato, «sino contra una tradición en occidente que ha unido una cosa con la otra cuando no es necesariamente fundamental que estén unidas», dijo. «En la misma Iglesia católica en oriente existe la posibilidad de que los curas católicos como yo puedan ser célibes o casados», argumentó Baró. «Esta es una cuestión que los curas plantean y no son los únicos. «En la misma Iglesia católica en oriente existe la posibilidad de que los curas católicos como yo puedan ser célibes o casados».
El sacerdote precisó que en Lérida hay curas de todas las opiniones, que no están agrupados en foros de opinión como Ondara y que el obispo no ha tomado una posición oficial. «Yo creo que estará a favor del celibato como todos los obispos, eso no significa que no respete la opinión de sacerdotes, de laicos, de cristianos que piensen que no tiene que ir las dos cosas juntas».
«Algunos diremos que nosotros hemos hecho una opción en un momento dado en la que accedimos al sacerdocio con el celibato, hemos aceptado esto», afirmó Baró para quien de cara a la falta de vocaciones la idea es pensar en separar los dos conceptos. «Que se separe, yo no sería envidioso de otra situación, cada uno vive lo que vive. Yo creo que es una cuestión que está planteada en la Iglesia que no se puede anular», finalizó.
«Algunos diremos que nosotros hemos hecho una opción en un momento dado en la que accedimos al sacerdocio con el celibato, hemos aceptado esto», afirmó Baró para quien de cara a la falta de vocaciones la idea es pensar en separar los dos conceptos. «Que se separe, yo no sería envidioso de otra situación, cada uno vive lo que vive. Yo creo que es una cuestión que está planteada en la Iglesia que no se puede anular», finalizó.