La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB) exhortó a estar vigilantes ante la nueva ley de salud aprobada el domingo, para que se proteja la libertad de conciencia y no se usen fondos federales para pagar abortos. De otro ladro criticaron la «orden ejecutiva» del presidente Obama firmada ayer, que no garantiza que el dinero de los contribuyentes no sea usado para financiar esta práctica anti-vida.
 
En una carta firmada por el cardenal Francis George, arzobispo de Chicago y presidente de la USCCB, los obispos recuerdan que se opusieron a la aprobación de la reforma de salud «porque hay pruebas convincentes de que expandiría el papel del Gobierno Federal en la financiación y facilitación del aborto y de planes que incluyen el aborto. El estatuto destina cientos de millones de dólares de nueva financiación a su implementación sin prohibir explícitamente el uso de esos fondos para el aborto, y proporciona subsidios federales a planes que incluyen abortos electivos».
 
Seguidamente señalan que comparten «plenamente la intención admirable del presidente Obama expresada en el borrador de su Orden Ejecutiva, donde afirma que “es necesario establecer un mecanismo de cumplimiento adecuado para asegurar que los fondos federales no sean usados para servicios de aborto”. Sin embargo, el mismo hecho de que una orden ejecutiva sea necesaria para clarificar la legislación señala las deficiencias del mismo estatuto. No entendemos como una Orden Ejecutiva, no importa la buena intención, puede sustituir las provisiones» de la ley.
 
Los obispos explican luego que la nueva ley «es profundamente deficiente porque no incluye el lenguaje necesario para otorgar protecciones de conciencia esenciales (tanto en lo referente al aborto como más allá de este contexto). Del mismo modo, muchos trabajadores inmigrantes y sus familias podrían quedar en una peor situación dado que no se les permitirá comprar seguro médico en los nuevos intercambios, o mercados, que se crearán, incluso si usan para ello su propio dinero».
Un experto líder pro-vida estadounidense con mucha experiencia también en Hispanoamérica explica que «la aprobación de la legislación relacionada a la salud ha sido una derrota muy grande para la causa de la vida, y también del reconocimiento pleno de los derechos de la conciencia y del verdadero sentido de subsidiaridad que debe existir en los programas de gobierno», informa Aci.
 
Seguidamente relata que a última hora, algunos congresistas demócratas, entre los que se encontraba el reconocido Bart Stupak, «que durante meses habían declarado su oposición a esta reforma si no incluía serias restricciones al aborto, anunciaron que iban a votar a favor de la legislación después de recibir una promesa del Presidente Obama de que emitiría una “orden ejecutiva"».
 
El experto explica luego que «la opinión casi unánime es que por varias razones una orden ejecutiva no puede afectar una legislación específica y en este caso se cree que va a ser muy poca efectiva».
 
Tras comentar que es difícil explicar exactamente lo que va a suceder ahora, con la reforma y la orden ejecutiva, el líder pro-vida señala que «habrá demandas en contra de la constitucionalidad de la legislación, También habrá intentos de modificarla en el futuro. Este tema será ahora tal vez el tema determinante para las elecciones federales que vamos a tener a finales de este año y cuyas campañas ya se están organizando alrededor de este punto».