Las insinuaciones de que los abusos sexuales y pederastia en un coro que fue dirigido por Georg Ratzinger «salpicaban» al hermano del Papa eran poco más que un titular oportunista.
Así se deduce de los datos aportados en el Osservatore Romano por el obispo de Ratisbona (de quien depende la institución afectada), que confirman las afirmaciones del padre Ratzinger de haber desconocido por completo los casos recientemente conocidos, en el marco del escándalo que sacude en las últimas semanas a la Iglesia alemana.
Monseñor Gerhard Ludwig Müller ha explicado que los dos casos vinculados a la estructura de la que formaba parte el coro dirigido por Georg sucedieron en 1958, mientras que el hermano del Papa dirigió dicho coro entre 1964 y 1994.
El complejo del Regensburger Domspatzen está constituido por un liceo, dirigido por un laico; un internado, dirigido por un sacerdote con la asistencia de educadores y pedagogos; y un coro, que fue el que dirigió el padre Ratzinger durante treinta años.
Pues bien, uno de los delitos lo cometió en 1958 un subdirector de la escuela primaria de Etterzhausen, que es independiente del Regensburger Domspatzen y sólo mantiene con el complejo un vínculo para ciertas áreas de la enseñanza de la música. Nada más conocerse los hechos, este profesor fue destituido y posteriormente condenado penalmente.
El segundo caso afecta a una persona que trabajó sólo durante siete meses en el Domspatzen, también en 1958. Doce años después fue condenado un delito de abuso sexual, y lo que se está investigando ahora es si pudo cometer algún otro durante su estancia en el complejo.
Ni por ámbito de influencia, pues, ni por fechas, Georg Ratzinger se ve afectado lo más mínimo por estos hechos.