La presidenta de la Junta General del Principado, María Jesús Álvarez; el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, y el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, además de las consejeras de la Presidencia y Cultura, María José Ramos y Mercedes Álvarez, respectivamente, fueron algunas de la autoridades que arroparon al Sanz en este acto, que fue seguido por miles de asturianos tanto en el interior de la catedral como en sus aledaños por medio de una pantalla de televisión.
Además, medio centenar de sacerdotes de la diócesis de Huesca y Jaca, anterior destino del prelado, y numerosos familiares y amigos se desplazaron hasta Oviedo para estar con Sanz en un día tan señalado para él, en el que tampoco faltaron sus antecesores en el cargo Carlos Osoro, actualmente al frente de la Diócesis de Valencia, y Gabino Díaz Merchán, pastor de la Iglesia asturiana durante 32 años y arzobispo emérito de Oviedo.
En su homilía, Sanz, que es el arzobispo más joven de España, ha agradecido al Papa Benedicto XVI su nombramiento y ha aprovechado su primera intervención como máximo responsable de la Iglesia en Asturias para ofrecer su colaboración a las instituciones civiles de forma «leal» y «cordial». «Cuenten conmigo en las iniciativas que para el bien de nuestros ciudadanos respeten íntegramente sus vidas y garanticen en todos los campos su libertad», ha manifestado.
En la eucaristía que sirvió de toma de posesión de Sanz concelebraron los 39 cardenales, arzobispos y obispos presentes y más de trescientos sacerdotes. Tras recibir el báculo que le acredita como arzobispo de Oviedo, que le fue entregado por el nuncio apostólico en España, Renzo Fratini, ha manifestado su «admiración» por la familia y ha advertido de los «réditos inconfesables que cobran quienes la ningunean, banalizan u orillan».
El nuevo arzobispo de Oviedo ocupaba la titularidad del Obispado de Huesca y Jaca desde 2003. Sanz ingresó en el Seminario Conciliar de Toledo en 1975 y en 1981 entró a formar parte de la Orden Franciscana. Fue ordenado sacerdote en 20 de septiembre de 1986 en Alcorcón (Madrid) y el 23 de octubre de 2003 fue preconizado obispo de Huesca y Jaca, cargo para el que eligió el lema episcopal de «Cristo es todo en todas las cosas», frase de la carta a los colosenses 3,11 del apóstol San Pablo, informa Efe.
Ha sido rector del Seminario Menor Franciscano de Ávila (19861991), director de la Formación Permanente de la Provincia Franciscana de Castilla (19911994) y comisario pontificio de Lumen Dei, entre otros cargos y desde 2009 preside la Comisión para la Vida Consagra.
El nuevo arzobispo de Oviedo tiene previsto desplazarse mañana hasta el santuario mariano de Covadonga para presidir la eucaristía en la basílica y rezar ante la imagen de la Virgen que se guarda en la Santa Cueva.