Titulado «La discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género», el documento se ha enfrentado a una gran oposición de sus detractors que enteinden que su contenido amenaza derechos fundamentales como la libertad de expresión, la libertad religiosa y de conciencia y la primacía de los derechos de los niños. Del mimo modo, las críticas se han centrado en que el documento, de aprobarse, perjudicaría en interés soberano de los Estados de proteger la moralidad opública, la familia y el interñes superior de la infancia.
 
El Centro Europeo para la Ley y l aJusticia (ECLJ, por sus siglas en ingles, una organización cristiana, advirtió a los parlamentarios en un extenso documento que el proyecto de resolución debía de ser enmendado para «mantener la definición de la familia y proteger el derecho fundamental a discrepar de la ideología que propmueve la identidad de género», informa Life Site News.
 
Las enmiendas a la controvertida resolución, deberían, a juicio del ECLJ, asegurar una definición de «incitación al odio» y «reafirmar que este concepto nunca se llevará a cabo como un a limitación de la libertad de expresión». Además, deberían aportarse definiciones sobre la «homophobia» e incluir un apoyo expreso al derecho fundamental a la libertad de opinión religiosa, tanto en público como en privado, incluyendo materias morales, según esta organización.