(Agencias/ReL) El Papa Benedicto XVI se reunió ayer al mediodía con los 40 arzobispos metropolitanos que ayer recibieron el palio durante la celebración eucarística en la basílica vaticana, acompañados por sus familiares. Entre ellos se encontraba el arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, monseñor Francisco Pérez González. El Santo Padre saludó a cada uno de los prelados en sus diferentes lenguas, y afirmó que "la imagen del cuerpo orgánico aplicada a la Iglesia es uno de los elementos fuertes y característicos de la doctrina de San Pablo, y por eso, en este año jubilar dedicado a él deseo confiar a cada uno de vosotros, a su protección celestial". "Que el Apóstol de las gentes --manifestó-- os ayude a que las comunidades que se os han confiado crezcan unidas y misioneras, concordes y coordinadas en la acción pastoral, animadas por un constante impulso apostólico". Benedicto XVI concluyó diciendo que "la condición del servicio de cada pastor es el amor a Cristo, al que no se debe anteponer nada".