Desde que fue aprobada por el Congreso de los Diputados el pasado 17 de diciembre, la ley del aborto ha sufrido un parón en su tramitación como consecuencia de las vacaciones parlamentarias que durante el mes de enero paralizan la actividad de ambas cámaras.
El proyecto de ley fue recibido por la mesa del Senado el 29 de diciembre, y remitido inmediatamente a la Comisión de Igualdad de esta cámara. De igual forma, la Mesa del Senado remitió el proyecto a los grupos parlamentarios abriendo el plazo de presentación de enmiendas a dicho proyecto.
El plazo para presentar enmiendas no empieza a correr hasta febrero. Desde ese momento, los grupos parlamentarios tienen diez días, prorrogables hasta quince, para elaborar y presentar a la Comisión de Igualdad las enmiendas y las propuestas de veto a la ley.
Recibidas las mismas, la Comisión puede decidir nombrar una ponencia que elabore un informe sobre el proyecto de ley. Si se hace así en este caso, la ponencia dispone de quince días más para presentar su informe, por lo que habría transcurrido ya todo el mes de febrero.
El proyecto de ley fue recibido por la mesa del Senado el 29 de diciembre, y remitido inmediatamente a la Comisión de Igualdad de esta cámara. De igual forma, la Mesa del Senado remitió el proyecto a los grupos parlamentarios abriendo el plazo de presentación de enmiendas a dicho proyecto.
El plazo para presentar enmiendas no empieza a correr hasta febrero. Desde ese momento, los grupos parlamentarios tienen diez días, prorrogables hasta quince, para elaborar y presentar a la Comisión de Igualdad las enmiendas y las propuestas de veto a la ley.
Recibidas las mismas, la Comisión puede decidir nombrar una ponencia que elabore un informe sobre el proyecto de ley. Si se hace así en este caso, la ponencia dispone de quince días más para presentar su informe, por lo que habría transcurrido ya todo el mes de febrero.
Dado que el Senado dispone de dos meses de plazo para tramitar la ley desde su recepción desde el Congreso de los Diputados, y considerando que enero no es un mes hábil de trabajos, la tramitación de la ley debería haber finalizado como mucho a finales de marzo. Sin embargo, la Comisión de Igualdad no está obligada a nombrar una ponencia, lo que agilizaría el trámite en quince días.
A partir de la recepción de las enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios, la Comisión de Igualdad tiene un plazo de otros quince días para elaborar su dictamen definitivo, que es el que será votado en la sesión plenaria del Senado en la que se decidirá sobre la ley.
Esta sesión plenaria no debería estar convocada para antes de la semana del 8 al 12 de marzo, aunque lo más probable es que tenga lugar en la siguiente semana, en alguno de los plenos a celebrar los días 23, 24 y 25 de ese mes, justo la semana anterior a Semana Santa.
A partir de la recepción de las enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios, la Comisión de Igualdad tiene un plazo de otros quince días para elaborar su dictamen definitivo, que es el que será votado en la sesión plenaria del Senado en la que se decidirá sobre la ley.
Esta sesión plenaria no debería estar convocada para antes de la semana del 8 al 12 de marzo, aunque lo más probable es que tenga lugar en la siguiente semana, en alguno de los plenos a celebrar los días 23, 24 y 25 de ese mes, justo la semana anterior a Semana Santa.
Sin embargo, existen bastantes posibilidades de que el Senado rechace la ley del aborto mediante la imposición de un veto a la misma, que sería votado en la misma sesión plenaria, dado el actual juego de mayorías que configuran la Cámara Alta. Si ocurre tal cosa, la ley sería devuelta al Congreso de los Diputados, que tendría que volver a votar en sesión plenaria sobre el levantamiento del veto, cosa que requiere la mayoría absoluta.
Esto podría retrasar la aprobación de la ley unos quince días más, por lo que la aprobación definitiva no se produciría hasta la segunda semana de abril, posiblemente en alguno de los plenos a celebrar los días 13, 14 y 15 de este mes. La firma del Rey y su publicación en el BOE tendrían lugar, entonces, a finales de abril o principios de mayo.
Esto podría retrasar la aprobación de la ley unos quince días más, por lo que la aprobación definitiva no se produciría hasta la segunda semana de abril, posiblemente en alguno de los plenos a celebrar los días 13, 14 y 15 de este mes. La firma del Rey y su publicación en el BOE tendrían lugar, entonces, a finales de abril o principios de mayo.
En caso de que el Senado no interponga un veto a la ley del aborto, ésta quedaría aprobada y remitida al Gobierno y al Rey para su ratificación antes de Semana Santa.