Profesionales por la Ética, una de las asociaciones más destacadas de la sociedad civil, en especial por su campaña de defensa de los derechos de los padres a defender a sus hijos de la imposición de Educación para la Ciudadanía, se ha sumado a la petición de varios movimientos civiles de que se someta a referendum consultivo la aprobación de la ley del aborto que impulsa el Gobierno y cuya tramitación parlamentaria ya está en marcha.
Para la asociación presidida por Jaime Urcelay, son al menos tres, las razones fundamentales que aconsejan la celebración de la consulta, según prevé la Constitución Española en su artículo 92.1 para casos de «decisión política de especial trascendencia». Así, desde PPE argumentan que un ejercicio de democracia directa es preceptivo en esta ocasión dado que la ley «representa un cambio revolucionario en los valores básicos de nuestra comunidad, al pretender convertir lo que hoy es todavía un delito en un supuesto "derecho de la mujer", a la que además deja abandonada sin ofrecerle alternativas para el libre ejercicio de la maternidad».
En segundo lugar, señalan, «tanto os datos de la ciencia como la opinión de reconocidos juristas demuestran la falta de verdaderos argumentos racionales para una reforma legal de este calado». «El ser humano existe, con plena dignidad desde el momento de la concepción y es siempre merecedor de tutela jurídica», señalan.
El tercer motivo fundamental que conseja la celebración de un referendum estriba, a jucio de PPE, que «este proyecto del gobierno está provocando una profunda fractura social que no puede ser negada por más tiempo», como ha demostrado el escaso margen de votos el pasado 17 de diciembre en la votación del Congreso, la negación de la libertad de voto en la mayoría de los casos en un asunto tan grave, y la amplísima contestación social.
Para Jaime Urcelay, «los políticos quieren decidir por todos en un asunto de la mayor gravedad, sin un debate social real y al margen de la opinión de los ciudadanos». «La ampliaciójnj del aborto ni tan siquiera estaba en elprograma electroal del PSOE y esto hacer ilegítimo un proyecto de tanta trascendencia», ha añadido Urcelay, para quien «el referendum será una prueba ineludible de democracia para nuestros políticos».