Nik Abdul Aziz Nik Mat declaró al diario «New Straits Times» que los ulemas -clérigos islámicos- pueden ser excelentes maridos polígamos y desempeñar un papel clave en recuperar el prestigio de la costumbre, permitida por el Corán.
«Por lo general, cuando a un hombre le gusta una mujer bella, la tomará como su segunda esposa, pero después de que tenga niños, se divorciará de ella, y ésta es precisamente la mala imagen con la que tenemos que acabar», explicó el religioso, informa Efe.
Nik Aziz dijo que es muy importante en estos momentos proyectar una mejor imagen de la poligamia «especialmente en la era de la comunicación y la información digital, para que las prácticas del Islam puedan ser emuladas por todas las comunidades».
La legislación de Malasia permite a los musulmanes tener hasta cuatro mujeres si un tribunal religioso considera que dispone de suficientes recursos como para sustentar económica y emocionalmente a todas sus esposas e hijos. Sin embargo, no es habitual que decidan casarse con más de una o, como mucho, dos mujeres. Desde grupos contrarios a esta práctica se afirma que la poligamia es cruel y se ha desviado de su objetivo inicial en el Islam, proteger a las viudas y huérfanos.
«Por lo general, cuando a un hombre le gusta una mujer bella, la tomará como su segunda esposa, pero después de que tenga niños, se divorciará de ella, y ésta es precisamente la mala imagen con la que tenemos que acabar», explicó el religioso, informa Efe.
Nik Aziz dijo que es muy importante en estos momentos proyectar una mejor imagen de la poligamia «especialmente en la era de la comunicación y la información digital, para que las prácticas del Islam puedan ser emuladas por todas las comunidades».
La legislación de Malasia permite a los musulmanes tener hasta cuatro mujeres si un tribunal religioso considera que dispone de suficientes recursos como para sustentar económica y emocionalmente a todas sus esposas e hijos. Sin embargo, no es habitual que decidan casarse con más de una o, como mucho, dos mujeres. Desde grupos contrarios a esta práctica se afirma que la poligamia es cruel y se ha desviado de su objetivo inicial en el Islam, proteger a las viudas y huérfanos.
Malasia es una nación de mayoría musulmana tolerante en los mensajes, pero conservadora en las costumbres. En Perak y Selangor, los dos estados donde gobierna el PAS, se prohíbe a las mujeres musulmanas pintarse los labios, llevar zapatos de tacón durante las horas de trabajo o dejar visible el cuello y la cabeza fuera del hogar o la oficina.
También ha vetado el juego e impuesto colas distintas para hombres y mujeres en las tiendas, y los islamistas incluso plantean imponer la «ley seca» y extender el veto al consumo de alcohol a ciudadanos de todas las religiones.