- ¿Cómo nació la iniciativa de crear la revista Misión?
- La revista Misión nació por una iniciativa de la Fundación Logos, un apostolado de los Legionarios de Cristo, pues se vio que hacía falta en España una publicación en la que los católicos encontraran ideas y argumentos claros sobre cuestiones que les interpelan en sus vidas. Una revista que, con un lenguaje actual y ameno, les contestara interrogantes como: qué hacer cuando mis hijos reciben una educación sexual que les entrega condones sin siquiera plantearles lo que es el amor o qué puede hacer un matrimonio que desea tener hijos y se enfrentan con una situación de infertilidad.
Misión ofrece respuestas a éstas y otras muchas preguntas acudiendo a entrevistas cercanas con expertos y a testimonios de personas que viven estos retos. No son respuestas teóricas, son reportajes periodísticos, historias entretenidas, que de un modo cercano van ofreciendo temas para comentar en familia y discutir con amigos.
- ¿De dónde el nombre «Misión»?
- Hoy en día cuando se escucha hablar a los directivos empresariales es frecuente que salga la frase: «Nuestra misión es»... Y entonces nos explican lo que da la razón de ser a la empresa que dirigen. De igual manera, desde el pensamiento estratégico se anima a las personas y a las familias a que se planteen su misión.
La revista es también esa invitación para que cada uno descubra y encarne plenamente su misión. Por eso, en cada edición de la revista vamos lanzando distintas misiones que puedan llenar de sentido la vida. Si echa un vistazo a las portadas de ediciones anteriores en nuestra web (www.revistamision.com -en el link «Números anteriores»-) descubrirá que debajo de la cabecera aparece una frase que va cambiando número a número.
Esa frase es la misión de cada edición y la invitación particular que hacemos con esa edición a nuestro lector. Hasta ahora les hemos propuesto misiones como: «Educar para el amor», «Sonreír a los años», «Erradicar la miseria», «Decidir amar plenamente», «Llenar de sentido el trabajo», entre otras. En el interior de la revista aparecen varios reportajes y entrevistas que abordan esa misión.
Pero además del tema central de cada número, la revista también cuenta con secciones que contemplan las distintas facetas de la vida de la persona: salud, nutrición, economía, historia, belleza, tendencias, recetas de cocina, causas solidarias, viajes, libros, cine, espiritualidad, y mucho más.
- ¿Se puede decir que es una publicación para mujeres que también pueden leer los hombres? ¿Por qué las mujeres como destinatarias principales de esta revista? ¿Alguna sutil apuesta por un renovado «feminismo»?
- Personalmente no me gusta la palabra feminismo pues aunque lo llamemos «nuevo» o «renovado» será difícil depurarlo de una concepción de la mujer «independiente» y «autónoma», que busca desligarse a toda costa del varón. Pienso que varón y mujer necesitan complementarse cada vez más y trabajar al unísono para transformar la sociedad, hacerla más humana, más cercana a las necesidades auténticas de la persona.
En Misión apostamos siempre por esa complementariedad entre el varón y la mujer. Lo que ocurre es que Misión entra a la familia de la mano de la mujer, es decir, ella es nuestro altavoz en casa.
Tenemos muchos hombres que nos leen y nos llaman a hacernos sus comentarios, pero son las mujeres las que con más frecuencia responden al tipo de inquietudes que planteamos en la revista. La mujer tiene una sensibilidad especial para captar los temas que transforman y por eso confiamos en que de su mano las familias podrán redescubrir más pronto el atractivo de los valores cristianos.
- Creo que no nos equivocamos si decimos abiertamente que la revista Misión es confesionalmente católica. ¿Es una característica que realmente valoran las familias? ¿Cómo queda reflejado este cariz católico en la publicación?
- No nos equivocamos. Misión es una revista para las familias católicas. No es una revista religiosa o espiritual. Es una revista que atiende a las distintas necesidades de las mujeres y las familias de hoy desde una perspectiva católica.
Eso se nota en el modo cómo abordamos las grandes y las pequeñas secciones de la revista. Desde el tema de la ideología de género o la eutanasia, hasta el maquillaje de fiesta o los últimos tratamientos estéticos. La mejor muestra de que las familias católicas sí valoran esta propuesta es el gran número de suscriptores que hemos conseguido en los 18 meses que llevamos editando la publicación.
- Con más de 40.000 familias españolas suscritas, la revista Misión es la revista católica española más difundida entre las familias católicas en 2009. ¿A qué se debe este éxito y a qué la compromete como directora?
- El éxito de Misión se debe a que somos una revista distinta. Los católicos de España esperaban una publicación así: que de un modo ameno y amable, les abriera horizontes para vivir con coherencia su fe en cada ámbito de su vida.
Mi compromiso como directora es muy claro: lograr que los lectores cada vez esperen con más ilusión la llegada de la publicación a sus casas y que, al tenerla en las manos, no se la queden para ellos y quieran compartirla con otros. Es mi compromiso y también mi gran reto.
- Un par de preguntas un poco más personales: desde su personal apreciación, ¿se puede ser esposa, madre y profesional y vivir realizada? ¿Su sentir particular ante la deriva contra la vida de los niños en los vientres de sus madres? ¿Desde la revista Misión se hace algo en estos campos?
- Quizás no se puede vivir realizada pero sí se puede vivir plenamente feliz. El sentido que se da a la «realización» de la mujer es bastante egoísta y sólo se puede vivir feliz cuando uno se entrega con pasión a lo que le corresponde hacer en cada momento. El tema de la conciliación familia y trabajo lo hemos abordado en Misión en algunas ocasiones, y lo seguiremos abordando, pues aún hay mucho camino por recorrer para que la mujer pueda contribuir con su trabajo profesional al mundo laboral pero que a la vez logre mantener la prioridad en lo que es más importante: su familia, su esposo, sus hijos. En casa nadie podrá sustituirla.
En cuanto a la defensa de los no nacidos, en Misión nos hemos propuesto aportar pequeñas gotas para contribuir a instaurar la cultura de la vida, que defiende la dignidad de cada persona desde el momento de la concepción hasta la muerte. Tenemos una sección que se llama Por la vida y también hemos dedicado reportajes, entrevistas y números completos a la cultura de la vida.
- ¿Cómo proyecta la revista en cinco años?
- Quiero ver a Misión llegando a 500.000 familias católicas de España y convertida en un medio que se comenta, que influye positivamente, que apoya las causas importantes que generan cambio social, que da fuerza para vivificar las luchas que valen la pena, es decir, un apoyo claro para la mujer y la familia católica.
- Una revista con estas características se vuelve blanco favorito de posibles suscriptores y empresas que desean dar a conocer sus productos a través de ella. Quién desee suscribirse gratuitamente, ¿cómo puede hacerlo? Y los posibles anunciantes, ¿a quién deben dirigirse?
- Suscribirse a Misión es muy fácil. Hay varias formas de hacerlo: Llamando al 902 31 34 34 en horario de oficina, enviando el nombre, dirección y teléfono a suscripciones@revistamision.com, entrando en www.revistamision.com y rellenando el formulario de suscripción; o rellenando el cupón de suscripción que aparece en la página tres de cada revista y luego depositándolo en cualquier buzón de Correos (sin necesidad de poner sello).
Quienes deseen anunciar sus productos y servicios en Misión pueden ponerse en contacto con nuestros directores comerciales: Jara Bedmar y José Real en publicidad@revistamision.com.