J.I. Packer, uno de los más renombrados teólogos evángelicos de la actualidad, ha abandonado la Iglesia Anglicana canadiense tras afirmar que existe "liberalismo venenoso" entre sus líderes. Packer, con 81 años, fue reconocido por la revista Time en el año 2005 como uno de los 25 evangélicos más influyentes del mundo. Junto con 10 pastores de la misma denominación dejan la comunión de la Columbia Británica y se adhieren a una provincia más conservadora y ortodoxa, la del Cono Sur. El teólogo anglicano evangélico dijo que no puede seguir sirviendo bajo la autoridad del Obispo de Vancouver, Michael Ingham, porque el mismo raya en lo herético. Ingham fue sancionado en el año 2002 por bendecir uniones del mismo sexo en diócesis de Nueva Westminster. Hace unos meses otras 28 parroquias votaron a favor de dejar la Iglesia Anglicana de Canadá alegando que la denominación se había apartado de la ortodoxia cristiana y de la tradición Anglicana. Dichas parroquias se han asociado con provincias anglicanas de otros países. La iglesia a la que asiste Packer en Vancouver, dejó la comunión canadiense y buscó cobertura con la Provincia del Cono Sur. Según John Stackhouse, profesor de Teología y Cultura del Colegio Universitario de Regent en Vancouver, se diluye el cuerpo en Canada y hoy en día se puede hablar de dos cuerpos con este éxodo continuo de parroquias. "Sinceramente esto no había sido visto en la historia canadiense, y no estoy seguro que se haya visto tampoco en la historia anglicana", afirmó Stackhouse. "Con el tamaño tan considerable de estos grupos disidentes, y el apoyo internacional que tienen ... podemos ver dos diferentes órganos en un mismo territorio geográfico", señaló tras explicar que las iglesias anglicanas tradicionalmente se habían organizado a nivel geográfico, y no por fronteras teológicas. Si bien la controversia se ha centrado en la homosexualidad, Stackhouse dice que la cuestión es algo más que sexo. "El punto central es como reconocer la verdad cristiana", dijo Stackhouse a la prensa canadiense. Packer es uno de los paladines en el anglicanismo de la teología cristiana conservadora. En su best-seller de 1973 "El Conocimiento de Dios (Knowing God)", describía a la Biblia como la absoluta autoridad sobre la verdad divina, afirmando claramente que la práctica de la homosexualidad es un pecado grave. Algunos anglicanos liberales como el Pastor Rev. Kevin Dixon, piensan que Packer está asumiento una actitud muy "literal" al leer la Biblia. "Es importante que la gente entienda que las Sagradas Escrituras tienen muchos matices. Creo que tenemos dar espacio para que la gente llegue a un acuerdo. No siempre fui de la opinión que relaciones entre parejas del mismo sexo fuesen coherentes con el Evangelio de Jesucristo, pero ahora creo que si pueden ser coherentes". Packer sostiene que los principales líderes de la Iglesia Anglicana de Canadá han modificado la interpretación del cristianismo, mientras que él y otros conservadores anglicanos han permanecido comprometidos con el anglicanismo tradicional. "Soy de por sí un anglicano chapado a la antigua", declaró. El resto de anglicanos conservadores, tanto los más cercanos al catolicismo como los afines al protestantismo evangélico, creen que el núcleo de las creencias del cristianismo se ponen en tela de juicio de la Iglesia Anglicana de Canadá, y predicen que este éxodo es una primera ola pues acontecerán muchas más parroquias que dejaran de reconocer a la autoridad canadiense. "En cada diócesis donde ha habido bendiciones de parejas del mismo sexo han ocurrido divisiones", declaró Stackhouse, quien añadió que "esto no ha hecho sino empezar". Durante el fin de semana pasado la Red Anglicana de Canadá, grupo de parroquias que han asumido la autoridad de la Provincia del Cono Sur en América del Sur, celebraron una conferencia con el arzobispo Gregory Venables, líder de esa provincia meridional. Su llegada a la conferencia provocó la reacción de la Iglesia Anglicana de Canadá, que le solicitó no intervenir en asuntos internos del país. Venables se negó y alegó que el grupo conservador le habían pedido su participación.