(Efe/ReL) En su intervención tras el almuerzo, Rubio Castro agradeció a los sacerdotes su labor "silenciosa, eficaz, alegre y generosa", y les invitó a vivir su ministerio "en pobreza, crecer en oración y preparar la predicación" como normas fundamentales. En este ámbito, el obispo enmarcó su propuesta de que los sacerdotes cedan a los parados y a las familias con dificultades económicas el 10% del salario correspondiente a la nómina del próximo mes de mayo como "signo testimonial del presbiterio diocesano fruto de la caridad que nos exige el Padre en la celebración de la Eucaristía". Monseñor Rubio Castro explicó que la donación será destinada al denominado "Banco de Caridad" -un proyecto puesto recientemente en marcha por Cáritas Diocesana- y pidió a los sacerdotes que "libremente" determinen la forma de hacer realizable esta iniciativa, de la que ya existen precedentes en otras diócesis españolas. La agudización de la crisis económica ha puesto en números rojos a Cáritas que ha visto incrementada la demanda de ayuda en un 40% en los últimos meses. El salario base que cobran los sacerdotes españoles oscila entre los 600 y 800 euros al mes. El sueldo de los obispos es mayor y ronda los 900 euros, según los datos del Fondo Común Diocesano.