(Fides/ReL) La necesidad nació de los 250 prisioneros de fe cristiana que residen en la cárcel de Adiala. Gracias al interés de las Iglesias cristianas y a la disponibilidad de las autoridades gubernativas, ha sido posible realizarla. Un papel importante, dicen fuentes de Fides en Pakistán, lo tuvo también la organización musulmana “Life Pakistan” que pelea a nivel nacional parar garantizar el derecho al culto de los fieles de otras religiones, como los cristianos, y que apoyó abiertamente la construcción de la capilla en la cárcel. El espacio puesto a disposición era de cerca de 1000 m2, mientras diversas instituciones cristianas se han ocupado de conseguir auspiciadores y benefactores para construir la iglesia. Muchos detenidos han trabajado y colaborado en la construcción del edificio y ahora gozan de ese espacio para reanimar el corazón y el espíritu. Se llevarán a cabo celebraciones especiales en las festividades cristianas como Navidad, Pascua, Pentecostés y encuentros, oraciones, santas Misas el Domingo y todas las veces en que habrán sacerdotes y pastores cristianos, de diversas confesiones, que se preocupan de la espiritualidad de los detenidos, realizando actividades de catequesis y evangelización en la cárcel. Los prisioneros de fe cristiana están notablemente satisfechos y agradecidos por la disponibilidad de este espacio, donde pueden detenerse a rezar y meditar por horas. Se han hecho asimismo evangelizadores entre otros detenidos invitándolos a la oración y realizando con ellos gestos de solidaridad, un hecho insólito en un ambiente difícil como el de una cárcel.