(
Luis F. Pérez/ReL) En el
texto se puede leer que "por muy repugnante que nos pueda parecer el proceder de algunos de sus dirigentes ante los asesinatos y atentados, o por una hipotética connivencia o complicidad con ETA (aún por demostrar judicialmente), dejar sin representación a una parte minoritaria pero significativa de nuestro pueblo, es un mal para esa comunidad política: limita el ejercicio de un derecho fundamental, distorsiona el mapa electoral y propicia un proceso de excepcionalidad apoyado en una ley también excepcional: La Ley de Partidos”. Además, en el artículo se advierte de que "votar con responsabilidad exige la ausencia absoluta de la coacción, el miedo y la amenaza”. En ese contexto, los autores declaran que “es necesario resaltar la importancia del debate largamente suscitado en el colectivo de los presos de ETA y manifestado a la luz pública estos últimos meses”. “No pueden justificarse las descalificaciones y las presiones sufridas por algunos miembros de este colectivo y sus familiares, por haber ejercido su derecho a la libertad de opinión y a la crítica política a los métodos de la organización armada”, afirma el texto, que viene firmado por Patxi Meabe, Pako Etxebeste, Arturo García y
Ramón Balenziaga.