(ElCorreodeAndalucía/ReL) El gerente de Tussam, Carlos Arizaga, afirmó que dicha iniciativa se desmarca de las condiciones que la empresa impone a los anuncios que se colocan en los autobuses, toda vez que sólo se pueden colgar los reclamos puramente comerciales o mercantiles, a excepción de las marcas que anuncian bebidas alcohólicas y tabaco, vetadas en toda España. O cumplen esa condición o no se exhiben, salvo que cumplan la otra condición: que sean anuncios de publicidad institucional del propio Consistorio. Esas condiciones se fijaron en el contrato firmado con Clear Channel, encargada de los anuncios en Tussam. Todo lo que se salga de esos límites se rechaza. De hecho, Arizaga afirma que se han desechado peticiones similares de la iglesia evangélica y un sindicato de enfermería. “No se baraja” la posibilidad de hacer una excepción con el bus ateo, pese a que la campaña no ha tenido obstáculos en Madrid, Barcelona y Málaga.