(Zenit/ReL) "Cuando fui recibido por el Santo Padre antes de venir aquí, él me dijo: espero poder ir a Portugal en un futuro próximo. Aunque no se habló de fechas, Benedidcto XVI quiere estar en la tierra de Santa María, en un futuro no lejano", explica monseñor Passigato. Se trata, añadió, de "un deseo firme, un propósito del propio Santo Padre". El nuevo Nuncio llega en un momento en que la Santa Sede y Portugal negocian los reglamentos que concretarán las disposiciones del Concordato firmado entre ambos Estados en el año 2004. Monseñor Passigato, este concordato "supone un punto muy importante de llegada y de acuerdo", y éste "sigue existiendo" en la Comisión paritaria que trabaja para traducir en decretos y leyes el contenido del acuerdo bilateral. El nuevo Nuncio afirma que es necesario "valorar la presencia de los católicos en la sociedad", pues "los católicos representan, desde el punto de vista sociológico, el 80,8% de la población. Es una realidad que debe expresarse en todas las circunstancias, en todas las situaciones: en las escuelas, en los hospitales, en el ejército... ¡es una realidad!". Al final de la entrevista, el prelado se refirió a la fuerte identidad mariana de la fa de los portugueses, gracias a la devoción a la Virgen de Fátima. "Tenemos una promesa, de Nuestra Señora en Fátima, que asegura que su corazón triunfará y que Portugal permanecerá católico, creyente, cristiano", concluyó. "Si los cristianos en Portugal mantienen firme su amor a Nuestra Señora, creo que también mantendrán viva su fe, que los lleva directamente a Jesús". Monseñor Rino Passigato, italiano, fue nombrado por el Papa Nuncio para Portugal el pasado 8 de noviembre. Antes lo había sido de Perú y Bolivia.