(Efe/ReL) Kiril es considerado un religioso aperturista y partidario de tender puentes con la iglesia Católica. Jefe del departamento Eclesiástico Exterior desde 1989, el nuevo patriarca de la Iglesia Ortodoxa rusa ha sido el máximo representante de la misma en la última ronda de consultas con el Vaticano iniciada tras la entronización del Papa Benedicto XVI en 2005. "En estos momentos se dan todas las condiciones para la solución de los problemas que nos han enfrentado en los últimos años", señaló tras reunirse en Roma con el Pontífice, al que conoce desde los años 70 del pasado siglo. Kiril, de 62 años, considera que Benedicto XVI "está dispuesto a poner todo de su parte para garantizar la solución en el menor tiempo posible de los problemas y evitar que surjan otros nuevos". No sólo eso, el nuevo Patriarca ruso también aboga por que ambas iglesias cooperen estrechamente en la defensa de los valores cristianos en Europa, frente a la expansión de otros credos, como el islam.