Durante 17 años Javier García Herrería fue profesor de filosofía en Bachillerato. Después de trabajar seis meses en un medio de información religiosa, decidió establecerse por su cuenta y hacer una newsletter que resumiera, cada semana, lo que ocurría en la Iglesia. Un año después del lanzamiento, el resultado es sorprendentemente positivo. Veamos por qué.

-¿Cómo decidiste hacer la newsletter? ¿Qué objetivo tenías?

-Desde hace muchos años sigo la actualidad de la Iglesia consultando diversos medios digitales. A partir del año 2015, de vez en cuando, surgían polémicas con algún aspecto que no se entendía del Papa Francisco, por lo que era recomendable consultar medios de tendencias diferentes para tratar de hacerse una idea de qué estaba ocurriendo realmente.

»Esto, como es lógico, llevaba un tiempo, por lo que pensé que sería útil qué existiera algún boletín que resumiera lo que ocurre en la Iglesia, con enlaces a los artículos de mayor interés, algo parecido a un resumen de prensa, como el famoso Kloshletter. Con una mirada distinta, positiva pero también crítica… Y, tras varias idas y venidas, me animé a lanzarlo en noviembre de 2022.

-¿Cuáles son los resultados después de un año?

-Actualmente hay 2.250 personas suscritas al boletín, que es gratuito. Lo más sorprendente es que la tasa de apertura media está en el 73%, es decir, que a la gente le interesa muchísimo (la media de apertura de una newsletter habitual ronda el 15%) . Crece únicamente por el boca-oreja y las recomendaciones de los lectores, pues no hay ninguna institución respaldando el boletín, es algo absolutamente casero.

-¿Puede leerse el boletín en alguna página web?

-No, solo es posible acceder a él suscribiéndose para recibirlo por correo electrónico o por whatsapp.

La newsletter solo es accesible por suscripción (mail o whatsapp). Foto: Benjamin Hershey / Unsplash.

-¿Qué es lo que más valoran los lectores?

-Tomando como referencia las respuestas de la encuesta de satisfacción que envié a los lectores, a la gente le gusta tener una síntesis semanal que le ahorre tiempo y, al mismo tiempo, que le expliquen las principales noticias de la Iglesia sin ocultar los aspectos negativos. Además de resumir lo que ocurre, ofrezco enlaces a los 30 o 40 artículos más relevantes que he leído esa semana. Dedico unas cuatro horas diarias a leer información religiosa de medios en castellano, italiano, inglés o alemán, por lo que facilito al lector textos poco habituales en nuestro entorno. 

-¿La newsletter es especialmente larga? ¿Por qué la gente la lee hasta el final?

-La información religiosa no es una información más, no es como leer el Marca. Las personas que siguen este tipo de noticias tienen un gran interés por la Iglesia, por eso les preocupa mucho más que la mayoría de cosas y están dispuestos a dedicarle tiempo.

»También procuro ser ameno y, como destacan los lectores que poco a poco voy conociendo personalmente, valoran mucho que consigo sacarles un par de sonrisas a pesar de que los boletines son duros: las noticias sobre la Iglesia son como las de los periódicos en general, muchas veces se habla más de lo negativo que de lo positivo.

-¿Qué es lo más difícil de tu trabajo?

-Sin duda lo más difícil es mantener el equilibrio entre contar todo lo negativo que pasa y tratar de ser fiel y delicado con el Papa y la jerarquía. En muchas ocasiones esto no es fácil, sobre todo después de la muerte de Benedicto XVI, pues el número de noticias desconcertantes está aumentando notablemente.

»Es muy difícil estar de acuerdo con algunas decisiones del Papa, pero lo que trato de hacer ver a mis lectores es la intención que mueve al Santo Padre. La visión que tenemos los fieles, evidentemente, muchas veces es limitada y es importante no caer en interpretaciones desafectivas que alejen de la unidad con el Papa o la jerarquía.

-¿Todo el mundo debe seguir la actualidad de la Iglesia?

-Es muy bueno que todos los católicos conozcan las principales publicaciones del magisterio del Papa y las prioridades pastorales de su obispo. Lo que ya no estoy seguro que sea tan recomendable es seguir de cerca el ajetreo diario de la Iglesia. Las noticias negativas pesan mucho en algunos fieles y no es necesario estar al día de todo, especialmente si son novedades desalentadoras. Hay mucha gente sencilla centrada en su trabajo, su familia, su entorno y que reza por la Iglesia. Esto es lo más importante.

»Desde luego, yo no aconsejo mi boletín a gente que pierde la paz con facilidad. Sí es muy útil, en cambio, para los que siguen la actualidad de la Iglesia, o desean seguirla a partir de ahora.

-¿Cómo estructuras la newsletter? ¿Qué temas abordas?

-Analizo un tema de fondo cada semana y luego cuento con secciones fijas: magisterio del Papa, noticias variadas, moral sexual, abusos, cristianofobia, artículos recomendados y una sección final con noticias positivas sobre la Iglesia, testimonios y anécdotas inspiradoras.

-¿Cuál sería el objetivo para 2024?

-Me gustaría llegar a 5.000 lectores manteniendo la tasa de apertura y que algún suscriptor me mande un jamón. Eso, sin duda, estaría muy bien.

»Quien quiera hacerse una idea, puede ver el último boletín pinchando aquí, y quien desee suscribirse al boletín por correo electrónico o por whatsapp, puede hacerlo en este enlace.