(Efe/ReL) El papa Benedicto XVI afirmó ayer, durante la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro, que la resurrección de Cristo es una "
verdad histórica" que está "
ampliamente documentada". No obstante, Benedicto XVI lamentó que "
tanto hoy como en el pasado existe quien, de manera diferente, la pone en duda o incluso la niega".
Es la verdad central de la fe cristiana. Según el Papa, "
si se debilita en la Iglesia la fe en la resurrección, todo se detiene, todo se deshace" mientras que "
la adhesión del corazón y de la mente al Cristo resucitado cambia la vida e ilumina la existencia de las personas y de los pueblos". Con sus palabras el Santo Padre desautoriza a los teólogo heterodoxos que pretenden diluir o negar el hecho de la resurrección. Para el Obispo de Roma "
la certeza de que Cristo ha resucitado da valor, audacia profética y perseverancia a los mártires de cada época", así como "
anima a muchos hombres y mujeres a dejar todo y a seguirle". "
En la Iglesia todo se comprende a partir de este gran misterio, que ha cambiado el curso de la historia y que se hace actual en cada celebración eucarística", añadió. E instó a los fieles "
a afirmar de nuevo esta realidad fundamental de la fe porque la adhesión a Cristo muerto y resucitado cambia la vida de las personas y da valor y fortaleza al testimonio de los creyentes". En el
saludo a los fieles de habla castellana, Benedicto recordó que "
en la muerte del Señor vemos el inmenso amor con que nos ha amado, pero sólo la resurrección es prueba segura de la verdad de todo lo que Él ha enseñado".