El año 2019 ha sido especialmente bueno para los santos lugares. Así lo atestiguan los datos de turismo que han ofrecido tanto Israel como los territorios palestinos una vez que se ha iniciado 2020. La Custodia de Tierra Santa recoge estas cifras históricas, que califica de elocuentes: 4.551.600 turistas, un 10,6% más respecto a 2018.

Para el ministro de Turismo de Israel, Yariv Levi, 2019 concluyó con un nuevo récord para el turismo. Récord de todos los tiempos con la llegada de turistas también en el mes de diciembre de 2019: 358.300, un 10% más respecto a diciembre de 2018. Este es el tercer año consecutivo en el que se baten récords de llegada. Jerusalén y Tel Aviv son las ciudades más visitadas.

Según la Custodia de Tierra Santa, el Ministerio de Turismo de Israel no especifica el número de peregrinos, pero es visible el crecimiento de visitantes en los santuarios. También la ministra de Turismo palestina Rula Ma’yaa señala el récord de peregrinos. A causa del elevado número de grupos, la Basílica de la Natividad en Belén ha ampliado tres horas el horario de apertura, hasta las 20 horas.

De este modo, el fraile Francesco Patton, custodio de Tierra Santa, muestra su deseo de que “el número de peregrinos continúe creciendo, y me atrevería a decir incluso que los mismos peregrinos son un factor de disuasión de eventuales formas más explícitas de conflicto. Espero y rezo para que los peregrinos continúen viniendo con fe a Tierra Santa, continúen viniendo aquí un poco como los Reyes Magos, guiados por la estrella, es decir, por la búsqueda personal pero también guiados por la Palabra de Dios, por la Escritura, para poder encontrarse con Jesús”.

Además, este franciscano señala que “rezamos y esperamos que la diplomacia, es decir, la capacidad de dialogar, prevalezca sobre el uso de la violencia, incluso cuando ya ha habido uso de la violencia, y en consecuencia haya que reconducir o tejer nuevas relaciones, así como dibujar la manera de salir de una situación que parece tener como única dinámica el ojo por ojo”.

Rodrigo, un peregrino brasileño, afirmaba desde Jerusalén: “Me ha sorprendido mucho, porque hay muchísimos peregrinos este año en noviembre. Es sorprendente ver esta manifestación de fe. Nuestro grupo es de 160 peregrinos en tres buses. Hoy es el último día, y los peregrinos vuelven felices de esta experiencia de fe. Por haber entrado en contacto con tantos peregrinos de Brasil y de todo el mundo. Esto no hace más que reforzar nuestra fe”.

Otra peregrina, Larissa, añadía: “Es la primera vez que vengo aquí con tantas personas, pero Dios nos da la gracia de visitar los santos lugares, donde podemos experimentar lo sagrado. Con tantas personas nos estamos organizando para llegar pronto, para que la esencia de la espiritualidad del Santo Sepulcro pueda ser absorbida por nuestro peregrinos”.

Publicado en la web de la Fundación Tierra Santa