En plena escalada de tensión entre Estados Unidos e Irán y el riesgo a que pueda desencadenar un conflicto a escala mundial, el patriarca caldeo de Bagdad, el cardenal Sako ha escrito una carta a los embajadores de ambos países en la que les ruega que acepten el diálogo y así evitar una posible guerra.
Frente al "aumento de la tensión" entre en Oriente Medio en un conflicto que implica más actores en la zona el cardenal pide a los embajadores de Washington y Teherán en Irak que sus líderes "muestren sabiduría" y busquen la paz.
Consecuencias "catastróficas" de otra guerra
En la carta a la que ha tenido acceso AsiaNews, monseñor Sako habla de consecuencias "catastróficas" que podría provocar un conflicto bélico e invita a los actores a privilegiar el diálogo como la única forma de resolver disputas. Porque, como señaló el cardenal, Oriente Medio "no puede soportar otra guerra".
Mientras tanto, la escala de tensión continúa entre los líderes de Teherán y Washington en un cruce de acusaciones mutuas. El presidente iraní, Hassan Rouhani, citado por la agencia Irna, se abre al diálogo pero no en este contexto. "Hoy la situación no es adecuada para entrevistas y nuestra única opción es la resistencia", afirma. Anteriormente, su homólogo estadounidense Donald Trump había amenazado con el uso de una "fuerza inmensa" si los intereses estadounidenses se vieran afectados en la región del Medio Oriente por la “hostilidad” iraní.
“Ante la escalada de tensión en la región y debido a nuestra doble responsabilidad, a nivel eclesial y nacional, apelamos a los líderes de la República Islámica de Irán (nuestra nación vecina) y de los Estados Unidos de América para mostrar sabiduría y un signo dirigido a la paz para contener el conflicto en curso”, afirma en su carta el patriarca caldeo.
El diálogo es la única solución
Sako les recuerda que “la región no puede tolerar otra guerra con consecuencias catastróficas” en la que todos tienen que "perder", especialmente las personas pobres y desarmadas.
Por esta razón –agrega- “creemos firmemente que el diálogo es la única forma de llevar adelante las necesidades actuales, con el objetivo de la coexistencia pacífica en Oriente Medio, el respeto mutuo y las buenas relaciones entre los seres humanos, para lograr el objetivo de la estabilidad”.
“Este diálogo conducirá a la paz que estamos esperando con tanta urgencia para evitar derramar más sangre. Por el contrario, la seguridad y la estabilidad deben ser garantizadas. Y nuevamente, promover un esfuerzo común para garantizar una prosperidad cultural y económica que beneficie a toda la población y al desarrollo de la nación”, añadió Sako.