Creer que solo hay dos sexos, hombre y mujer, no solo significa formar parte del "movimiento antigénero", sino que para la Inteligencia canadiense es también "una amenaza violenta" de cara a la seguridad nacional. Así lo refleja un documento del departamento liderado de forma interina desde hace unas semanas por Vanessa Lloyd, también responsable de dirigir el informe Mission Focused: Confronting the Threat Environment de 2023.
Tal y como se puede leer en el informe, el Servicio Canadiense de Inteligencia de Seguridad de Canadá (CSIS) habría sugerido en dicho documento que quien se opone a la ideología de género tiene opiniones "extremas" y plantea amenazas potenciales para la seguridad que crecerá en los próximos años.
"El CSIS considera que es casi seguro que la amenaza violenta que plantea el movimiento antigénero continuará durante el próximo año", se lee en una parte del informe.
La Inteligencia canadiense llegaría al punto de conceder mayor importancia a la "violencia motivada por la identidad de género" como una amenaza de "extremismo violento" superior a la del Estado Islámico.
En el apartado dedicado al "extremismo violento motivado ideológicamente", se establecen cuatro categorías de dicha violencia: la primera se dirige a la "violencia xenófoba", la segunda a la ejercida contra la autoridad, la tercera a la "violencia ideológica contra el género" y por detrás la amenaza que supone el Estado Islámico u otras organizaciones islamistas.
Entre los principales acontecimientos de violencia extremista con motivaciones ideológicas, el informe comienza refiriéndose al caso del 24 de febrero de 2020 como representativo de la hipotética amenaza que supone la comunidad incel, descrita por los medios como "una violenta comunidad de hombres heterosexuales, nacida en internet, que reivindican su derecho al sexo". Incel son las siglas de Involuntary celibate o celibato involuntario y por las agencias de verificación como "grupos de hombres cohesionado en torno a un fuerte de sentimiento de rabia y rechazo hacia las mujeres, que se definen a sí mismos por su incapacidad de establecer relaciones sexuales".
Su inclusión en el informe estaría motivado por el atentado de 2020, cuando un menor de 17 años entró a un salón de masajes y mató a una empleada hiriendo a otras dos personas afirmando formar parte de la comunidad Incel. En junio de 2023 el juez del Tribunal Superior de Ontario, Suhail Akhtar, condenó al joven por actividad terrorista.
Por detrás de este se encontraría como representativo de la violencia extremista por motivaciones ideológicas el atentado del 28 de junio de 2023, cuando Geovanny Villalba-Alemán, un joven de 24 años recién graduado de la Universidad de Waterloo apuñaló a un profesor y dos estudiantes. Su motivación, se dice en el informe, fue "probablemente su postura antigénero".
Es por ello que el CSIS "considera que es casi seguro que la amenaza violenta que plantea el movimiento antigénero continuará durante el próximo año y que los actores violentos" se inspirarán en el mencionado ataque "para llevar a cabo su violencia extrema" contra el lobby LGBT o contra objetivos "que consideren representantes de la agenda de la ideología de género".
"El ecosistema de retórica violenta dentro del movimiento antigénero, combinado con otras visiones extremas del mundo, puede conducir a una violencia grave. El CSIS considera que la exposición a entidades que propugnan una retórica extremista antigénero podría inspirar y alentar la violencia grave contra la comunidad 2SLGBTQIA+ o contra quienes son vistos como partidarios de políticas" proLGBT, detalla el informe.
Según el texto, las "interpretaciones religiosas" se encontrarían entre las razones que llevan a sumarse al "movimiento antigénero".
Solo después de los mencionados casos, el estudio de la Inteligencia canadiense se referiría al Estado Islámico y "el extremismo violento por motivos religiosos" que "alienta el uso de la violencia como parte de una lucha espiritual contra un sistema percibido como inmoral".
"Dios los hizo hombre y mujer"
El informe del CSIS no analizó la violencia ejercida contra quienes se han opuesto públicamente a la ideología de género, como Josh Alexander, adolescente y cristiano evangélico de 17 años expulsado de su escuela tras expresar sus opiniones contrarias a la ideología de género y citar la Biblia afirmando que "Dios los hizo hombre y mujer".
El estudiante de secundaria Josh Alexander ha sido expulsado de su escuela en Ontario por cuestionar los postulados de género.
El joven de 17 años seguirá previsiblemente sin poder continuar sus estudios en St. Joseph's High School en Pembroke, Ontario.
James Kitchen, asesor legal del joven, cuestionó la censura del caso por las autoridades: “Han sellado todo el expediente como si se tratara de un caso de seguridad nacional o de algún tipo de caso penal en el que hay todo tipo de cuestiones delicadas o actos graves a los que el público no debería tener acceso. Puede que no sea su intención, pero la junta escolar está tratando este caso como si fuera de ese nivel", detalló a Canadian Catholic News el pasado mes de enero.