El pasado 28 de septiembre los cristianos sirios vivieron un momento muy importante después de se eligiera como presidente de la Asamblea del Pueblo (el parlamento sirio) a un cristiano, algo que no ocurría desde la década de los 40 del pasado siglo.

Se trata de Hamoudeh Sabbagh, cristiano de 59 años. Según informa la agencia Fides, 193 de los 252 parlamentarios con derecho a voto apoyaron su nombramiento.

Sabbagh es abogado, pertenece al partido gubernamental Baarh y en el pasado ocupó el cargo de vicegobernador de la provincia de Hassaké.

Hasta la fecha, el único cristiano elegido hasta la fecha había sido Fares Khouri que dirigió dos veces el Parlamento durante el protectorado francés (19201946) y una tercera tras la independencia.


Este es sólo el último guiño a los cristianos por parte del gobierno sirio. Recientemente, Bashar Al Assad acudió a una reunión de jóvenes organizado por la iglesia siro-ortodoxa a los que dijo que los cristianos del país “no son huéspedes, ni son como ‘pájaros migratorios’. Forman parte desde el origen de la nación, y sin ellos no existiría la Siria que conocemos”.

Anteriormente, el presidente sirio visitó la sede del monasterio siro ortodoxo de la Santa Cruz, todavía en construcción, en la localidad de Saydnaya, acompañado por su esposa Asma y otros miembros de la familia. En esa ocasión, Assad y su esposa, acompañados por el Patriarca Ignatius Aphrem, también se reunieron con los niños y niñas alojados en la “Casa del pequeño ángel”, un orfanato sostenido por la Iglesia siro-ortodoxa, deteniéndose a almorzar con ellos y con los monjes y monjas del monasterio.