Pero este fin de semana se ha celebrado una gran fiesta muy alegre: la diócesis de Ubon Rachathani ya tiene su primer misionero, un nativo que saldrá de su tierra para evangelizar, primero en Hong Kong, luego quizá en China. Se trata del padre Phongphan, el primer tailandés en la congregación misionera del PIME, congregación de origen italiano muy presente en Asia.
Para celebrarlo, se reunieron mil personas, 2 obispos, 80 sacerdotes y un centenar de religiosas. Cifras importantes en una diócesis que, según datos de Catholic-Hierarchy.org, cuenta con casi 26.000 católicos (en los años 70 eran la mitad) y 60 parroquias, un porcentaje diminuto en una región de 8 millones de habitantes.
La ceremonia del domingo fue exótica y luminosa, al menos vista con ojos occidentales. "Se inició con una excepcional procesión de 80 bailarinas –típicas del noreste de Tailandia- que acompañaron al flamante sacerdote hasta el umbral de su casa. Como es tradicional en las ordenaciones budistas en honor de un nuevo monje, al P. Phongphan también fue hecho sentar en un carruaje adornado de flores, y luego fue acompañado por la familia y los amigos por las calles de la región hasta la iglesia, donde se realizó la celebración de su primera misa", explica una crónica de la agencia AsiaNews.
La diócesis de Ubonrachathani, tal como sucede en diversas diócesis de Tailandia, tiene un clero compuesto exclusivamente por sacerdotes y religiosas del lugar. Los misioneros ya son un recuerdo de épocas lejanas. El padre Phongphan es el decimotercer sacerdote nativo vivo que surge de esta parroquia compuesta por tres pueblos.
El padre del nuevo sacerdote es conocido como juglar o recitador: utiliza el canto, la poesía y la danza para comunicar la fe transmitida por los primeros cristianos de la zona. Es famoso allí su largo poema cantado y musicalizado que narra la historia de la parroquia. El hermano mayor es sacerdote de la diócesis de Ubonrachathani, la hermana mayor es monja de la congregación local “Amantes de la Cruz”, y el hermano menor está casado y vive en el pueblo. Es una iglesia pequeña, pero fuerte en vocaciones.