El siglo XXI ha visto crecer el catolicismo en la diócesis de Hong Kong (catholic.org.hk): en 1999 las estadísticas de la diócesis calculaban unos 347.000 católicos, atendidos por 330 sacerdotes. Los datos de 2016 mostraban un gran crecimiento, del 67%: 581.000 católicos, pero con menos sacerdotes (sólo 295).

Aproximadamente un 75% de los católicos son de etnia china, y un 25% de otros orígenes.

Hong Kong es una ex-colonia británica, con cierta autonomía dentro de China, que tiene 7,2 millones de habitantes: desde 1999, los católicos han pasado de ser un 5% a un 8% de la población. Buena parte del crecimiento viene dado por el bautizo de adultos, que incluye familias jóvenes que luego tienen hijos.

A principios de siglo XXI, se bautizaban unos 1.500 adultos cada año. Pero a partir del 2010 la cifra creció.

2010: 3.000 bautizos de adultos
2012: 3.500
2015: 3.600
2016: 3.200

Este año de 2019 serán bautizados en Pascua 2.800 nuevos católicos adultos.

Bautizos por inmersión en la parroquia de Saint John the Baptist en Hong Kong

Según explica la agencia AsiaNews, para la Iglesia de Hong Kong, las ceremonias de examen en las semanas anteriores al bautizo son “momentos realmente sentidos”. Giorgio Pasini, superior de los misioneros del PIME en Hong Kong explica que "los catecúmenos son numerosos y ya son muy activos en la vida de la comunidad. Este año, el gran número de bautismos infundirá mayor vitalidad a la Iglesia local”.

“Es raro que los nuevos cristianos provengan de una experiencia de fe ligada al budismo. Habitualmente, son personas que en el pasado no pertenecían a ninguna religión y que quizás respetaban el tradicional culto de los antepasados. Sin embargo, en estas prácticas no han hallado un significado para su vida. A partir de allí comienza una búsqueda personal que los lleva a encontrar [este sentido] en la fe católica y en el mensaje cristiano”, explica el Padre Pasini.

“En general, quienes los introducen en la Iglesia son amigos o familiares, pero también puede darse el caso de que acerquen a través de información reunida en Internet. En varios casos, se sienten atraídos por la posición que toma la Iglesia en temas como los derechos humanos”, añade el misionero.

Una catequesis de 18 meses o más

La catequesis es exigente: se piden 18 meses de preparación, y a veces más. Algunos, que a lo mejor buscan solo acceder a escuelas católicas para sus hijos, pueden exigir recibir solo algunos meses de formación. Como no lo consiguen, es posible que desistan y abandonen el proceso.

Siendo una cultura politeísta, hay otros que después del bautizo explican que siguen acudiendo al culto de otras religiones (budista, sintoísta) para recibir "más bendiciones de más divinidades". Por eso, la diócesis insiste en una formación en la fe más firme.