Hace poco más de un año que Asia Bibi, madre de familia cristiana muy humilde, fue liberada de su cárcel en Pakistán, donde pasó ochos años encarcelada y amenazada de muerte, bajo la particular legislación de "blasfemia" del país. Hoy vive escondida, pero libre, en Canadá, amenazada de muerte por extremistas islámicos.
El fotógrafo François Thomas ha difundido ahora su primera foto en libertad, desde Canadá, con la periodista francesa Anne-Isabelle Tollet, quien ya escribió un libro contando su injusta detención y cautiverio y ahora publicará en la editorial Rocher «Por fin libre», recogiendo el final feliz de su vida en libertad.
La periodista, que durante 10 años siguió su caso y escribió sobre ella para poder mantener la atención internacional sobre su caso y el de las víctimas de la "ley de blasfemia", se alegró mucho de poder tratar en persona por primera a Asia Bibi. "Mis hijos han crecido con su historia", explica la periodista.
Anne-Isabelle Tollet ha declarado a Aleteia que en Canadá se entrevistó con Asia Bibi: «Es una mujer burbujeante, luchadora, que nos da una franca lección de coraje». La periodista se sintió conmovida por su valentía.
En la entrevista en Aleteia, la autora desvela datos como el eco del llamamiento de Benedicto XVI a favor de Asia Bibi, las intervenciones de los distintos presidentes de Francia y la prudencia del Papa Francisco (los expertos en la negociación desde Pakistán veían que un llamamiento público del Papa se vería como una injerencia que dificultaría el proceso de liberación de Asia Bibi).
Una mujer valiente, alegre y con autoridad natural
«Cuando la conocí pude constatar hasta qué punto esta pequeña mujer es una valiente y luchadora, que nunca se ha apiadado de sí misma». La periodista francesa dice además que «tiene una autoridad natural, pero también es alegre y risueña, es viva e inteligente». «Está triste por haber salido de Pakistán, pero quiere seguir siendo la portavoz de todas las personas que están injustamente acusadas de blasfemia, especialmente los cristianos».
Los tribunales dieron la absolución a Asia Bibi el 31 de octubre de 2018 tras 8 años de cárcel. El 7 de noviembre, fue puesta en libertad, pero sólo 8 meses después logró abandonar Pakistán, donde su vida corría grave peligro por las amenazas de los islamistas. Desde mayo de 2018 vive oculta en Canadá, con su familia.
Por desgracia, explica la periodista Tollet, en Pakistán sigue usándose la Ley de Blasfemia para acosar a los cristianos, especialmente a los más pobres y analfabetos. "Poco después de salir de prisión, una nueva cristiana, Kausar Shagufta, una madre de cuatro hijos de entre 5 y 13 años, la reemplazó en su celda. Está sentenciada a muerte por blasfemia. Según el imán de una mezquita local, ella y su esposo enviaron mensajes de texto en inglés insultando al profeta. Estos hechos son aún más inimaginables ya que ambos son analfabetos. ¡Sí, todavía hay mucho trabajo!".
Shafqat Emmanuel y Shagufta Kausar, matrimonio cristiano analfabeto;
acusados de blasfemia en 2013; ella ocupa hoy la celda de Asia Bibi