Las normas anti-Navidad del rico sultanato de Brunei [440.000 habitantes, 20.000 católicos, 3 parroquias], en la isla de Borneo, no han afectado a la vida parroquial y a las comunidades cristianas, y buscan sobre todo la extensión de signos navideños, sobre todo consumistas, entre la población musulmana.

Lo que sí ha afectado a las parroquias este año es la coincidencia con el cumpleaños de Mahoma, por lo que las comunidades cristianas, a petición de las autoridades civiles, trasladaron por este año la misa de Navidad al 24 de diciembre. Lo explica AsiaNews.
 

Los católicos en Brunei "siempre han podido profesar su fe en público como una comunidad, y esperamos seguir así en el futuro". Lo dijo Cornelio Sim, vicario apostólico de Brunei, comentando la “prohibición” de festejar la Navidad impuesta hace varias semanas por el sultán del país, donde rige la sharia.

La pena para los que celebran la fiesta en las calles o en lugares públicos es de cinco años de prisión o una multa de 20 mil dólares.

Según el prelado, la prohibición no es tan grave como se ha informado por los medios de comunicación occidentales, y está dirigido principalmente a los musulmanes.

"Hemos sido informados - dice el vicario - que estas prohibiciones se dirigen principalmente a los musulmanes. El Ministerio de Asuntos Religiosos ha justificado está diciendo que es útil no alienar a los musulmanes de su fe. Supongo que los que han decidido estas medidas lo han pensado largamente, aunque no estamos al corriente de su línea de pensamiento".

De acuerdo con las directrices del Sultanato, los cristianos siguen teniendo la facultad para celebrar la ocasión de la Navidad, pero sólo "en privado" y de haber "notificado con antelación" a las autoridades.

Por otra parte, entre los gestos relacionados con la fiesta cristiana considerados "ofensivos" y por lo tanto fuera de la ley incluyen:

-uso de símbolos religiosos,
-encender velas,
-decorar árboles de Navidad,
-colocar decoraciones,
-usar sombreros de Santa,
-cantar himnos religiosos
-y enviar saludos.

Sim recuerda que la Constitución de Brunei reconoce la libertad de culto. Según el prelado, tampoco todas las prohibiciones son condenables.

"Siendo yo un religioso de profesión, entiendo los que tratan de temas que puede ser confusos para los miembros de su religión y poner en peligro su fe y la práctica religiosa". "Para ser honesto - continúa el Vicario - no creo que la falta de "Jingle Bells" [una canción sobre trineos, sin sentido religioso] o de "Frosty the Snowman" [un muñeco de nieve] en centros comerciales impida a los cristianos a vivir este tiempo de una manera especial. ¡Santa Claus, como es retratado en la cultura popular, no es una representación adecuada de lo que es la Navidad".

El prelado dijo que este año los cristianos no experimentaron ninguna diferencia a la forma en que celebraron la Navidad que en años anteriores.

Las parroquias del país han observado la "Misa del Gallo" como siempre. En Bandar Seri Begawan los católicos asistieron a la misa de Navidad en la mañana del 24 de diciembre, a petición expresa del Ministerio de Asuntos Religiosos, para no superponerse a la procesión por el nacimiento de Mahoma.

En otras parroquias, la Misa fue celebrada el 25 de diciembre. "Siendo día de Navidad una fiesta nacional - dijo el vicario Sim - muchas personas han participado en los ritos".

Además, las parroquias han abierto sus edificios en la noche para dar cabida a la fiesta anual de los trabajadores migrantes, en su mayoría filipinos.

"En Bandar Seri Begawa - dice el Vicario Apostólico - más de 1.500 trabajadores extranjeros asistieron al evento. Podían elegir entre una variedad de comida india, china y filipina. Estuvimos cantando, bailando y hubo rifa de regalos".