Son más de 170 cristianos las víctimas mortales de la matanza perpetrada por los musulmanes fulani en Nigeria. Quienes celebran el nacimiento de Cristo en el país africano lloran un año más a nuevas víctimas, después de que entre el 23 y el 26 de diciembre la etnia de pastores orquestase un ataque coordinado y deliberado contra 26 aldeas cristianas en Navidad.
El sacerdote Andrew Dewan, director de Comunicación de la diócesis de Pankshin, ha confirmado en las últimas horas a Ayuda a la Iglesia Necesitada que los ataques han sido dirigidos "específicamente contra cristianos".
Describe el comienzo de lo sucedido en la comunidad de Mushu, donde 18 personas fueron asesinadas y varias heridas. Sin casi espacio de tiempo, los atacantes asaltaron Tudun Mazat antes de que sus habitantes pudieran dar la voz de alarma. Dispararon de inmediato a las personas y fueron asesinadas, las casas y el maíz cosechado fueron incendiados, iglesias y clínicas también fueron quemadas. El sacerdote había estado en esta última comunidad aquella mañana celebrando la misa de Navidad. De Tudum Mazat, los musulmanes fulani acudieron a Maiyanga, donde mataron a 13 personas. En total, unas 20 comunidades fueron atacadas esa noche.
El sacerdote se pregunta por qué en comunidades en que los cristianos viven "codo con codo" con pastores fulani "no se vio afectada ninguna persona no cristiana y no se quemaron casas fulani".
"No hay duda de que los atacantes eran fulanis", afirmó el sacerdote.
El portavoz de la diócesis de Pankshin, se dirige a quienes consideran que este conflicto "no es religioso".
"El hecho de que haya tenido lugar en Navidad y de que los cristianos hayan sido atacados deliberadamente en una comunidad mixta, donde los musulmanes no son atacados, manifiesta claramente las características de un conflicto religioso. Sé que no a todo el mundo le gustaría admitirlo, pero para mí, que he estado en el terreno, observado y escrito sobre ello, hay signos de un conflicto religioso. El objetivo era infligir dolor y destrucción máxima a los cristianos", afirmó.
Entierro de cristianos en el estado de Plateau tras la matanza del 24 de diciembre.
Asimismo denunció la pasividad de las fuerzas de seguridad a la hora de prevenir la tragedia, y advierte de que "si no se hace algo drástico para lidiar con esta tormenta que se avecina", la probabilidad de que la gente se tome "la justicia por sus propias manos" será "bastante alta".
El sacerdote cree que las 170 víctimas aumentarán próximamente, pues "todavía hay muchas personas en los hospitales con lesiones de diversos grados".
Actualmente, Nigeria es el sexto país más peligroso para los cristianos. En uno de cada 3 estados del país se ha impuesto la ley islámica y siete de cada ocho asesinados por grupos violentos son cristianos. De 2012 a 2022, 39 sacerdotes han sido asesinados y 30 secuestrados. En 2023, 23 sacerdotes, seminaristas y religiosas han sido secuestrados y dos sacerdotes y un seminarista secuestrados.
ACN no deja de sostener a los cristianos perseguidos en Nigeria donde además sufren los ataques de los terroristas de Boko Haram y del Estado Islámico de África Occidental en el norte del país. Puedes ayudar desde este enlace a la Iglesia "mártir y viva" de Nigeria.