Los cristianos palestinos de Tierra Santa, preocupados por las medidas de seguridad que la policía israelí toma durante las celebraciones de Semana Santa, piden al gobierno israelí que las restricciones sean menores de lo que acostumbra en los últimos años, que dificultan y estrangulan el acceso de muchos cristianos a los Santos Lugares.
La Policía israelí por el momento ha respondido que los controles son necesarios para "evitar las crisis y mantener el orden".
Los cristianos no se han limitado a expresarse en voz alta sino que han llevado el tema a los tribunales. Un grupo de residentes de Jerusalén Este ha firmado y presentado una petición ante el Tribunal Superior de Justicia de Israel, pidiendo a la policía reducir las medidas de seguridad que suelen impedir el acceso de muchos fieles cristianos a los Santos Lugares en estas fechas.
El obispo auxiliar del Patriarcado Latino de Jerusalén, William Shomali, declaró que "cada cristiano tiene derecho a rezar en la Iglesia del Santo Sepulcro, y derecho a circular sin restricciones".
El temor es que los puestos de control de la policía israelí, en y alrededor de la Ciudad Vieja, podrían desalentar a los fieles de ir a la iglesia del Santo Sepulcro y otros sitios para asistir a las celebraciones.
Por su parte, el gobierno ha respondido señalando que el Tribunal Superior de Justicia de Israel no tiene una buena razón para tomar acción sobre las decisiones adoptadas por la policía. Pero el juez Noam Solberg, sin embargo, decidió que un panel de tres jueces examinará la petición esta semana.