Para los cristianos de Estambul, corazón económico y comercial de Turquía, este 8 de octubre ha sido un día de fiesta: en la iglesia ortodoxa siríaca de San Efrén, la primera y única construida en los tiempos modernos y republicanos, se celebró la primera liturgia eucarística en presencia de los fieles, después de más de tres años de obras.
La ceremonia estaba prevista para el 19 de febrero, pero se postergó debido al terremoto. Es el único edificio cristiano (ortodoxo siríaco) construido en el último siglo en Turquía. Tiene capacidad para 750 fieles y muchas personas solicitaron asistir a la inauguración. Así lo recoge el portal Asianews.
Con la presencia de Erdogan
El templo es el único "construido desde cero" en más de un siglo y está situado en el distrito de Yesilkoy, en la parte europea de la metrópoli, con un costo de aproximadamente cuatro millones de euros.
Aunque las obras, con la colocación de la primera piedra, comenzaron en 2019 -el presidente Recep Tayyip Erdogan estuvo presente en el evento- fueron necesarios casi 10 años para completar la construcción.
"Deberíamos haberla inaugurado el 19 de febrero pasado", recuerda uno de los líderes cristianos, pero el devastador terremoto del 6 de febrero "interrumpió los planes. Fue una gran tragedia para todo el país. En estas circunstancias era imposible", explica.
Continúa diciendo que es una obra que ha tenido un gran seguimiento entre las comunidades siríacas de todo el mundo, que han seguido de cerca el proceso de construcción, y muchos cristianos de Turquía han pedido asistir a la primera celebración.
En la ceremonia de inauguración participaron un representante del Patriarcado y un grupo de delegados tanto de Turquía como del exterior, así como funcionarios del gobierno. El templo, concebido como un proyecto de cinco plantas en un espacio vacío del cementerio católico latino, se encuentra en Yesilkoy en la zona europea, donde reside la mayor parte de la comunidad asiria.
Una de las plantas del edificio está reservada para eventos culturales de la comunidad, que puede reunirse allí después de la misa o al terminar ceremonias como bautizos, funerales y bodas, así como para encuentros y conferencias. En la planta baja se encuentran las dependencias del obispo, las habitaciones para recibir huéspedes y un aparcamiento.
En Turquía hay libertad de culto, pero en los últimos 20 años se han registrado varios casos de violaciones de la práctica religiosa, cambios de destino de las que alguna vez fueron basílicas cristianas (Hagia Sophia y Chora) e incidentes sangrientos por motivos confesionales.
Cabe recordar las interferencias del gobierno turco en la elección de los líderes cristianos, el asesinato de personalidades destacadas - el padre Andrea Santoro en 2006 y Mons. Luigi Padovese en 2010 - las confiscaciones de iglesias y edificios y el controvertido caso del pastor estadounidense Andrew Brunson. En los últimos meses también se han producido casos de disputas por tierras, profanación de cementerios y expropiación de lugares de culto.