Yousef Nadarkhani, el joven iraní de 34 años acusado por apostasía del islam, ha vuelto a afirmar su fe en Jesucristo por tercera vez ante los tribunales. Pese a que ello podría llevarle a la condena a muerte, su abogado ha manifestado ha expresado su confianza en que finalmente será liberado.
"Personalmente soy optimista y pienso al 95 por ciento que en el tribunal aceptarán mis argumentos y lo liberarán. Nadarkhani no se ha retractado, presentamos nuestra argumentación y pienso que hemos convencido al tribunal. Tendremos el veredicto dentro de una semana", su abogado, el abogado Mohammad Ali Dadkhad, declaró a los medios de comunicación occidentales.
Dadkhad ha argumentado ante los tribunales iraníes que Yousef, actualmente pastor evangélico, no apostató porque nunca fue musulmán practicante. De hecho, hasta los 19 años vivió sin práctica religiosa real y a esa edad se convirtió al cristianismo.
Por su parte los gobiernos de Alemania, Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos se han manifestado contundentemente para que Yousef sea liberado.
"Su condena violaría el Pacto Internacional de Derechos Civiles que Irán suscribió libremente", ha declarado el ministro de Exteriores de Francia, Bernard Valero.
Estados Unidos estimó este jueves que Irán ejerce un "desprecio total" hacia la libertad religiosa si las autoridades islámicas ejecutan al pastor.
"Estados Unidos condena la sentencia a muerte para el pastor Youcef Nadarkhani. La ejecución de la pena capital sería una nueva prueba del desprecio de las autoridades iraníes hacia la libertad de culto", declaró el portavoz de la Casablanca, Jay Carney, en un comunicado.
Por otro lado, el jefe de la diplomacia británica, William Hague, pidió el pasado miércoles a Teherán que reconsiderase la condena a muerte a este joven evangélico.
Este asunto "muestra las continuas reticencias del regimen iraní cuando deben respetar las obligaciones constitucionales e internacionales en relación a la libertad religiosa", añadió el ministro.