Emmanuel Macron visitó en la madrugada del martes los alrededores de la catedral de Notre Dame en cuanto lo permitieron las labores de extinción del incendio declarado este lunes. Acompañado por el arzobispo de París, Michel Aupetit, y de la alcaldesa de la ciudad, Anne Hidalgo, el presidente francés hizo una declaración ante los medios en la que se comprometió a reconstruir la catedral: "Esta historia es nuestra historia, es nuestra historia la que arde. Pero quiero tener una palabra de esperanza. Esta esperanza es el orgullo que debemos tener por todos aquellos que han luchado para que no sucediese algo peor". Macron se refería así al esfuerzo heroico de todas las dotaciones disponibles en París, que acudieron al lugar para intentar salvar la estructura del templo, lo que consiguieron al final a pesar de los gravísimos daños sufridos. Un miembro del cuerpo de bomberos está herido de consideración, pero todas las labores de evacuación y extinción se han realizado sin daños personales.

Macron, junto a Anne Hidalgo (a la izquierda de la foto) y monseñor Aupetit (a la derecha de la foto).

"Esta catedral tiene más de 800 años, hemos sabido construirla y, a través de los siglos, engrandecerla y mejorarla. Todos juntos reconstruiremos esta catedral", recalcó, antes de anunciar que a partir de este martes se abrirá una suscripción nacional y serán llamados "los mejores talentos" para la reconstrucción: "Reconstruiremos Notre Dame", concluyó Macron.

Se da la circunstancia de que en las últimas semanas han sido atacadas, incendiadas y profanadas decenas de iglesias en toda Francia, en medio de un silencio prácticamente total de las autoridades políticas y de los medios de comunicación, y con un perfil bajo adoptado ante estos hechos por la conferencia episcopal. Ante esta situación, dos diputados pedían al presidente de la Asamblea Francesa que se creara una comisión de investigación ante estos ataques.

Conmoción nacional

En torno a las 18.50 horas de este lunes se desató un incendio en la catedral de Notre Dame de París, que obligó a evacuar el templo y por el momento ha provocado el derrumbe de la aguja del templo, de 93 metros y 750 toneladas de peso, que ha caído sobre la cubierta, que también se ha hundido. Sin embargo, los bomberos han logrado que la estructura de la catedral quede a salvo.

Tras desatarse el incendio, la catedral fue desalojada rápidamente. El capellán de los bomberos, el padre Fournier, entró en el templo en llamas y salvó las Hostias consagradas así como las reliquias que hay en la catedral, entre las que destaca la Corona de Espinas.

 

El origen del incendio se puede deber, según las principales hipótesis, a los trabajos de renovación que se estaban llevando a cabo en su interior. Según parece, el último operario abandonó la catedral a las 17.30 horas, hora y veinte minutos antes de que se declarase el incendio. La Fiscalía de París ha abierto diligencias de investigación, en principio considerándolo un hecho fortuito vinculado a alguna anomalía técnica de las obras de restauración.

El techo, devorado por el fuego, ha sido destruido, y también la bóveda.

Cada año pasan unos 13 millones de personas por la iglesia, que tiene más de 8 siglos de historia.

Tras el incendio, la artista ecuatoriana Cristina Correa Freile colgó en su cuenta de Instagram un dibujo que se ha viralizado. Representa a Quasimodo, el personaje creado por Víctor Hugo en Nuestra Señora de París, presentado en la versión de la película de Disney El jorobado de Notre Dame, abrazando al templo donde vivía.

Una llamada a la oración

Ante este suceso, y mientras todavía las llamas devoraban el histórico templo, jóvenes católicos franceses se concentraban junto a su catedral para rezar y cantar el Ave María. El propio arzobispo se unía después a estos jóvenes para rezar con ellos.

Antes de esto, monseñor Michel Aupetit pedía a los sacerdotes parisinos que hicieran sonar las campanas de todas las iglesias para llamar a los católicos a rezar ante el incendio de la histórica catedral.

Las reacciones de los testigos

Eduardo, un guía turístico español en París, declaraba al diario ABC: "Lo primero que vi es la aguja, construida por Viollet-le-Duc, en llamas entera. Ha sido increíble. Me he quedado mirándola y ha empezado a caerse lentamente. La gente ha empezado a gritar como si estuvieran tirando a alguien de un balcón", contaba

"Parecía una película de desastres. La aguja se ha caído sobre el techo y ha empezado a incendiarse todo. Al lado de la flecha había vidrieras y han explotado. No hay nada. Estoy viendo el fuego. Es como ver una imagen del infierno dentro de la catedral, es la destrucción de lo sublime. Estoy temblando. La gente llora y se abraza", explicaba Eduardo.

Jóvenes católicos franceses se han reunido junto a la catedral en llamas para rezar y entonar el Ave María

El periodista Nicolas Delasalle, en el periódico de izquierdas Libération, publicó: «Todas las obras de arte han sido salvadas. El tesoro de la catedral está intacto, la corona de espinas, los santos sacramentos».

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, canceló el discurso que iba a pronunciar este lunes en su "Gran Debate de la Nación". El mandatario acudió al lugar y desde Twitter escribió: «Emoción de toda la nación. Pensamiento para todos los católicos y todos los franceses. Como todos nuestros compatriotas, estoy triste de ver arder esta parte de nosotros».

Donald Trump, ha calificado de «terrible» lo ocurrido en París. «Es tan terrible asistir a este gigantesco incendio de Notre Dame. Quizá habría que movilizar bomberos para apagarlo. Hay que actuar rápido», ha señalado. La canciller alemana, Angela Merkel, lamenta la pérdida, dice, de «un símbolo de Francia y de nuestra cultura europea».

Notre Dame estaba en restaurándose para evitar su deterioro. El Arzobispado de París estaba intentando recaudar 100 millones de euros para salvar y restaurar las esculturas de quimeras (del siglo XIX, en el tejado) y los arcos góticos de su edificio, en mal estado: la polución y el paso del tiempo han causado desprendimientos de piedra.

La catedral se encontraba en obras de restauración desde julio de 2018, y parece que el incendio podría haberse originado en uno de los andamios. El pasado jueves fueron retiradas 16 estatuas de cobre de la aguja que ha caído, por lo cual se han salvado del fuego. Medían 3 metros de largo y se habrían restablecido en su lugar en el año 2022, una vez finalizada la restauración.

Aunque aún se desconocen las causas del siniestro, este incendio sucede tras una oleada sin precedentes de ataques y profanaciones a iglesias católicas en Francia en los dos últimos meses, que apenas han tenido repercusión mediática.