En la mañana de este martes el Ministro de Interior de Austria, Karl Nehammer, ha confirmado que un tiroteo del lunes por la tarde en el centro de Viena fue causado por terroristas islámicos, que mataron al menos a 4 civiles e hirieron de gravedad a otras 6 personas, incluyendo un policía.
El titular de Interior confirmó que un terrorista abatido por los disparos de las fuerzas de seguridad ha sido identificado como "un simpatizante de Estado Islámico".
Fuentes del Ministerio del Interior explicaron a la agencia de noticias APA que la policía ha registrado ya varios domicilios y ha realizado detenciones. Un portavoz del Ministerio del Interior, Harald Soros, ha explicado a la misma agencia de noticias que las autoridades creen que podría haber cuatro personas directamente implicadas en el atentado.
Varios medios de comunicación han destacado que no había atentados terroristas en la capital desde hacía 40 años.
"Austria ha sido una democracia fuerte durante 75 años, moldeada por valores básicos como la tolerancia y el Estado de derecho. El ataque ha sido contra los valores democráticos austriacos. ¡No lo vamos a tolerar!", ha subrayado el Ministro de Interior.
Lucha "entre civilización y barbarie" y no "entre religiones"
El canciller (Jefe de Gobierno) austriaco, Sebastian Kurz, declaró que el país no se dejará intimidar por los terroristas.
«Los autores y los que están detrás de la idea serán investigados, cazados y llevados ante los tribunales para que sean sometidos a un juicio justo», ha prometido Kurz. «No caeremos tan bajo como ellos. Lucharemos contra el terrorismo con toda la fuerza de la ley pero sin perder de vista que nuestro enemigo, el islamismo extremista, no solo quiere causar muerte y dolor, quiere también dividir nuestra sociedad. Y eso no lo permitiremos».
El mandatario austriaco añadió: «No dejaremos espacio a ese tipo de odio, porque nuestros enemigos no son, nunca, los creyentes de una religión, nuestros enemigos no son nunca las personas que vengan de un determinado país, sino que son los extremistas y los terroristas». E insistió: «aquí no se trata de una lucha entre musulmanes y cristianos o de austriacos contra extranjeros. ¡No! Se trata de una lucha entre las muchas personas que desean vivir en paz y unas pocas que desean la guerra. Una lucha entre civilización y barbarie en la que vamos a pelear con todos los medios a nuestro alcance».
6 heridos graves
El atentado en Viena tuvo lugar el lunes por la noche en hasta seis puntos del centro de la capital austriaca. En un primer momento mató a tres civiles e hirió de gravedad a otras 6 personas. El martes se ha confirmado que una mujer herida ha fallecido, por lo que en total hay cuatro víctimas mortales, dos mujeres y dos hombres.
Uno de los heridos es un agente de policía de 28 años, en situación "crítica" aunque permanece "estable". Recibió varios disparos mientras realizaba labores de vigilancia junto a una sinagoga de la capital.
El alcalde de Viena, Michael Ludwig, ha destacado que el terrorista que ha muerto estaba "muy bien preparado", con un fusil de asalto semiautomático, una pistola y un machete. El alcalde ha puntualizado que el cinturón de explosivos que tenía era falso.
Las autoridades piden a los ciudadanos que tengan vídeos o fotos de los hechos que no los difundan sino que los hagan llegar a la policía. También piden que la población se mantenga sin salir a la calle. Los estudiantes quedan exentos de ir a sus escuelas o universidades. Un millar de efectivos del ejército y la policía han rodeado el centro de la ciudad, según el diario austriaco 'Der Standard'.
Campanas a las 12... incluyendo la de los cañones turcos
A las 12 del mediodía de este mmartes han sonado por los difuntos las campanas de las iglesias de Viena, incluyendo la campana "Pummerin" de la catedral de San Esteban, que se fabricó con el metal fundido de los cañones que los turcos abandonaron en su retirada en el año 1683, cuando una alianza de países cristianos derrotó a su ejército asediador. Se considera la campana más grande de Austria.
La Iglesia ha anunciado un funeral en la catedral de San Esteban para este miércoles.
El arzobispo de Viena, el cardenal Christoph Schönborn, pidió a la población que no responda a la violencia y al odio con pánico o más odio. "El odio sólo despierta nuevos odios", ha advertido. "Quien entra en pánico está siempre en peligro de propagar este pánico", ha insistido el cardenal austriaco.
Otros obispos austriacos se han expresado en esa misma línea y han declarado sus condolencias y oraciones por las víctimas y sus familias.
El presidente de la Conferencia Episcopal de Austria, el arzobispo Franz Lackner, mostró su desconcierto. "¿Qué ideología equivocada e inhumana estaba en juego? ¡Disparar al azar a personas reunidas pacíficamente! Los creyentes deben condenar este acto en el nombre de Dios, oponernos a ello interiormente con toda la fuerza de espíritu y fe". Y añade el arzobispo Lackner: "No nos doblegaremos ante la violencia y no dejaremos nuestra vida cotidiana".
Después de Niza y las caricaturas groseras de Mahoma
El atentado ha sucedido 4 días después de que en Niza (Francia) un joven islamista tunecino, llegado recientemente al país, matara a 3 tres personas en la catedral de la Asunción de la ciudad mediterránea. Dos semanas antes, un joven checheno de 18 años degolló a Samuel Paty, su profesor de historia y geografía, por haber mostrado unas caricaturas satíricas de Mahoma en clase.