Ploumen anunció que el fondo financiaría proyectos para aumentar el acceso a la contracepción y el aborto, así como la "educación de las mujeres" en los países en desarrollo,
Esta medida surge en respuesta al reestablecimiento por parte de Donald Trump en EEUU de la llamada "Política de la Ciudad de México", la cual establece que los fondos públicos EEUU no pueden fincnaciar organizaciones internacionales que realicen o promuevan el aborto.
En una de sus primeras acciones como presidente de EEUU, Donald Trump ha prohibido financiar organizaciones que promuevan el aborto
Ante estos acontecimientos, la Federación One of Us exige que se ayude a las mujeres, y no al aborto. Su presidente, Jaime Mayor Oreja ha apuntado que "la Iniciativa Ciudadana Europea One of Us, ha sido la iniciataiva ciudadana europea más exitosa hasta ahora" ya que "casi dos millones de ciudadanos apoyan con sus firmas la exigencia a las instituciones europeas de prohibir el fondo de las actividades que suponen la destrucción de la vida humana".
Por su parte, Carlo Casini, veterano político italiano y presidente honorario de One of Us, afirma que "el Tribunal Europeo de Derechos Humanos nunca ha reconocido el derecho al aborto y ha impuesto a Europa la neutralidad sobre este tema. El Tribunal de Justicia de Luxemburgo declaró la dignidad humana del embrión, desde el momento de la concepción. Ofrecer dinero a organizaciones que hacen propaganda y aplican el aborto en el mundo, significa salir de esta neutralidad, alentar el aborto y violentar el principio de igual dignidad humana que el artículo 2 del Tratado de la UE establece como fundamento de la Unión".
La falta de ayuda y atención durante el embarazo es una de las causas que lleva a las madres a tomar la decisión de abortar
Mientras tanto, Thierry de La Villejégu, vicepresidente de la federación añade que "el primer deber de la UE con respecto a las mujeres es permitirles dar a luz un bebé en condiciones de dignidad. Insto a los países europeos a desarrollar rápidamente una atención médica de alta calidad para todas y cada una de las mujeres embarazadas. La financiación, por parte de la UE, de programas de promoción y aborto en los países en desarrollo es un acto de pura violencia, una violación de la conciencia de la mujer y una violación de la soberanía nacional. Estos programas deben ser condenados".
Los datos de la Organización Mundial de la Salud de 2012 muestran que el 91% de las muertes maternas "son prevenibles". Las mujeres experimentan sufrimiento debido a la escandalosa falta de atención efectiva durante el embarazo y el parto, resultando que 333.000 de ellas mueren anualmente, 99% de las cuales se producen en los países en desarrollo.