Finlandia se considera un país modelo en educación: obtiene casi siempre las mejores notas en los informes PISA y muchos investigan las causas. ¿Será porque 8 de cada 10 familias van a las bibliotecas casi cada sábado? ¿Será porque toda la enseñanza es pública? ¿Será porque los maestros están muy bien pagados? ¿O porque la mitad de los niños no van a guarderías y no pisan el colegio hasta los 7 años? ¿O porque casi todo el país pertenece a la misma etnia, lengua y cultura?
Otro tema que se puede analizar es su trato a la asignatura de Religión en la escuela. Se trata de un país con una Iglesia de Estado, la Iglesia Luterana de Finlandia, a la que pertenecen, al menos nominalmente, el 70% de los finlandeses.
Pero en la escuela -que, hay que repetirlo, es cien por cien pública, objetivo al que aspirarían muchos partidos socialistas y comunistas en Europa- se cuida exquisitamente el derecho de los padres a elegir la formación religiosa de los hijos en clase.
Ignacio Díaz, Presidente del Sindicato de Profesores de Religión PREC, muy extendido en Cataluña, explicaba en unas jornadas en octubre que el país se planteó recientemente establecer una asignatura de religión "aconfesional", pero se ha descartado. "Para ellos, la libertad de los padres a poder escoger el tipo de educación que quieren para sus hijos -sobre todo en el ámbito religioso- es fundamental. En este sentido, son tan respetuosos que incluso están permitiendo que se den clases de religión islámica ¡en árabe! por falta de profesorado con un nivel suficiente de finlandés".
Sobre este tema habló en esas jornadas de octubre María Gutiérrez Arana, una española que lleva 20 años siendo profesora de religión en Finlandia. En su ponencia destacó los puntos fuertes de la religión en la escuela en este país que es "superpotencia en educación".
El país ha decidido potenciar valores contra el radicalismo religioso pero también contra el individualismo/consumismo y ha visto que una "religión aconfesional" no sería eficaz. Más datos:
- Las familias que se declaran oficialmente luteranas deben recibir la asignatura de religión luterana: no pueden elegir otra
- Las demás familias de otras religiones pueden elegir la religión que quieran (unos ortodoxos pueden elegir la asignatura católica, por ejemplo)
- Desde 2003, si hay 3 alumnos de la misma confesión en un colegio y los padres hacen la petición, el director del centro está obligado a organizar la clase de religión
- Si hay 3 niños que lo piden en una misma ciudad, aunque repartidos en distintos colegios, los directores deben organizar el transporte para que reciban la clase
- El Estado supervisa los contenidos y libros de la asignatura junto con representantes de cada religión
- El Estado ayuda a financiar los libros de texto las religiones muy pequeñas, como la católica
- Se enseña a todos los profesores de distintas asignaturas que la clase de religión merece respeto
- A los alumnos, desde pequeños, se les habla de las otras religiones desde el respeto
- Solo ha habido 4 episodios de violencia grave en las escuelas, ninguno por motivos religiosos
A continuación, publicamos el vídeo de la ponencia de la profesora María Gutiérrez Arana, transcrita por la Federació de Cristians de Catalunya.
María Gutiérrez Arana, profesora de religión en Finlandia
Transcripción jornada 23 octubre de 2019 en Barcelona
En 1970 Finlandia hizo una gran reforma educativa pragmática con métodos innovadores a nivel estatal, igualitaria y accesible a todos -no existe educación privada en Finlandia-, y global en el sentido que la enseñanza allí tiene en cuenta todas las necesidades de los alumnos. Por ejemplo, en los colegios hay psicólogos, logopedas, médicos y dentistas: todo depende del colegio.
El Estado se encarga de la educación y del bienestar global del alumno, al igual que las actividades extraescolares y clases de refuerzo, y todo a través del colegio.
Todo ello ha llevado que los continuos cambios de estructuras, la globalización, las separaciones familiares, la violencia doméstica, la inseguridad, los medios virtuales de relación en los niños, etc… Están produciendo un detrimento del bienestar de los alumnos y son más vulnerables; no tienen capacidad de resistir a largo plazo situaciones de dificultad, de sufrimiento o de ser constantes en los estudios.
Esto ha producido un aislamiento y una pérdida de valores sociales… Incluso un empobrecimiento de las relaciones sociales. Fruto de esta educación sale un individuo que solo piensa en sí mismo. Antes era una sociedad muy solidaria por las situaciones de frío extremo y se ayudaban entre ellos.
Cuando se hizo la reforma educativa de 2016, cambiando los planes de estudio, se pensó en eliminar la asignatura de religión pero se vio que no era posible porque era la única asignatura en donde se podía abrir la puerta a un respeto de los valores familiares, que muchas familias ya habían perdido…
Una vuelta a esos valores a través de la religión. En Finlandia, que es protestante, una familia que es luterana no puede elegir el tipo de religión para sus hijos, debe de ser asignatura de religión luterana. Las demás familias de otras religiones pueden elegir la religión que quieran.
La ley que hicieron en 2003 es muy buena, pues exige que si hay tres alumnos de la misma confesión en un colegio y los padres hacen la petición, el director del centro está obligado a organizar la clase de religión y luego, si estos 3 niños no están en el mismo centro pero sí en la misma ciudad, los directores de los distintos centros tienen que organizar el transporte y demás para que se lleve a cabo la clase de religión.
Porque han visto que esto produce una mejora de los valores, y como muchos de estos alumnos son también extranjeros, darles su propia religión en el centro les ayuda a tener a una mejor confianza en sí mismos, a sentirse valorados en su origen, evitando la radicalización. El Estado está muy comprometido en esto.
Los contenidos de la religión está en el proyecto de estudios, que lo hace conjuntamente con los representantes de las confesiones y también controlan mucho los libros de texto. El Estado edita los libros. Por ejemplo, la iglesia católica es muy minoritaria allí, pues existe desde hace solo 55 años, la diócesis católica. Pues el Gobierno también ayuda a editar los libros de religión católica.
Y también se hace una labor de mentalización del resto de los profesores en el respeto hacia las clases de religión. También en el plan de estudios los alumnos, desde pequeños, se les habla de las otras religiones desde el respeto.
Las consecuencias que se buscan con este tipo de enseñanza son evitar el racismo en la sociedad y la discriminación por motivos religiosos.
En Finlandia ha habido cuatro episodios de violencia grave en las escuelas y ninguno ha sido por motivos religiosos sino por el problema del aislamiento, de la soledad de individuos que no saben relacionarse con las personas y que han perdido el sentido de la vida.
Por otro lado, lo que se busca fomentar con el actual plan de estudios es que estos alumnos de religiones minoritarias encuentren sus propias raíces. Cada semana reciben dos horas de su lengua materna, en el caso que no sea el finlandés. Producen más amor a la nueva sociedad en la que están si conocen sus raíces.
En ningún caso, se ha hecho una asignatura en la que estén todas las religiones juntas porque han visto que se quedaría todo diluido