El plan de educación sexual del Gobierno socialista de Croacia es, según la Iglesia católica del país, adoctrinamiento en la ideología del homosexualismo político y promoción del hedonismo

Son tres lecciones de 45 minutos cada una, que cada niño recibirá año tras año a partir de tercero de primaria, incluidas en la asignatura obligatoria de "Educación y Salud".

La Iglesia no se ha limitado a pronunciarse en la prensa y en los templos, sino que ha iniciado la distribución de folletos en los que critica la asignatura porque "ha sido adoptada sin debate público ni enfoque profesional".

Además, las asociaciones católicas croatas aseguran que el programa de estudios es un disfraz para el "adoctrinamiento de los niños por la ideología del homosexualismo, el erotismo y el sexismo".

El nivel de polémica, afirma la agencia Efe, ha desbancado el debate sobre el desempleo récord, la recesión, los problemas de la deuda y hasta la próxima entrada del país en la UE. El 86 % de sus 4,3 millones de habitantes se declara católico.

Desde enero, todos los alumnos croatas a partir de tercero de primaria tendrán tres clases por curso de temas de educación sexual, que van desde la masturbación, la contracepción y la "diferencia" entre sexo y género.

Ya en su mensaje de Navidad, Josip Bozanic, cardenal y arzobispo de Zagreb, denunció que con este proyecto, el Ejecutivo provocará "la destrucción del hombre y la desdicha para Croacia".

Más radical fue el obispo auxiliar Valentin Pozaic, quien comparó al Gobierno con los nazis y pidió una nueva operación "Tempestad", en alusión a la ofensiva en la que las fuerzas croatas expulsaron en 1995 a decenas de miles de serbios del país. La prensa progresista respondió acusándolo de instigar a un golpe armado contra el Ejecutivo.

Con la tensión aumentan los gestos de agresión contra lo católico: un desconocido lanzó la semana pasada una bomba de humo al atrio del seminario de curas en la ciudad de Split, al sur del país.

Y un activista anticatólico desnudo irrumpió en la pasada Noche Vieja en la catedral de Zagreb gritando "sexualidad en las escuelas", mientras las monjas chillaban "satanás" y trataban de impedir que un grupo de turistas japoneses fotografiaran al "poseído".

El Gobierno croata habla de más de 2.000 embarazos no deseados al año (no se especifica en qué edades) y un continuo aumento de casos de enfermedades de transmisión sexual (tampoco se especifica en qué edades ni colectivos).

"Según las encuestas, solo un 20% de los alumnos conversa con los padres sobre problemas de educación sexual", ha indicado el ministro Jovanovic, de Educación (sin especificar edades).

Las asociaciones católicas más radicales aseguran, sin embargo, que el verdadero objetivo de la educación sexual es "preparar a los niños desde pequeños para prácticas perversas y monstruosas", entre las que citan a la homosexualidad y la pederastia.

De hecho, algunas asociaciones de padres han anunciado que boicotearán la asignatura y no mandarán a sus hijos a clase cuando se vaya a tocar el tema de la educación sexual.

Desde el Ministerio de Educación se ha recordado que la materia de "Educación y Salud", en la que se tratan también temas de higiene y alimentación, es obligatoria y que la no asistencia será considerada como cualquier otra ausencia injustificada.