El reparto gratuito y masivo de ejemplares del Corán en algunas ciudades de Alemania ha hecho saltar las alarmas de los servicios secretos tras la aparición de un vídeo con amenazas contra varios periodistas que habían publicado informaciones sobre la distribución del libro sagrado de los musulmanes.


Desde hace varios meses y bajo el eslogan «Lee. En nombre del Señor que te creó», un grupo de salafistas se dedica a repartir coranes en el área urbana de algunas ciudades germanas y en las proximidades de escuelas. Su objetivo es distribuir 25 millones de ejemplares.

Numerosas personas han aplaudido esta iniciativa, pero no todas las informaciones al respecto han sido positivas. La Fiscalía de Colonia investiga un vídeo con amenazas contra un redactor del Tagesspiegel y otro del Frankfurter Rundschau. Una voz distorsionada ofrecía información detallada sobre «los monos y cerdos que han publicado informaciones falsas sobre la unión de salafistas Dawa FFM en Fráncfort y sobre otros hermanos». La grabación ofrecía todo tipo de datos personales y fotos sobre los periodistas.

El presunto autor del mismo, Ibrahim Abou Nagie, es un reconocido predicador islamista radical vigilado desde hace años por los servicios secretos alemanes y uno de los impulsores del reparto de coranes. Desde 2005, tiene una página web para dar a conocer su interpretación del Islam en Internet y ofrece la posibilidad de convertirse en salafista a través de conferencias vía Skype. Según los últimos datos, en la actualidad, la cifra de salafistas en Alemania ya alcanza los 5.000.

Según el Ministerio del Interior de Renania del Norte-Westfalia, el reparto de coranes es «una sutil campaña publicitaria de la ideología salafista». Una visión que es apoyada por la Oficina de Protección de la Constitución (BfV), que lo califica como «truco propagandístico».


Las mayores críticas a esta iniciativa llegan desde el partido de Angela Merkel, la Unión Cristiano Demócrata (CDU). «Condeno rotundamente este proyecto. Es un abuso del Corán a favor de maquinaciones extremistas», señaló su líder parlamentario, Volker Kauder.

Para el líder del Partido de Los Verdes (Die Grünen), Cem Özdemir, de origen turco, «la estrategia que sigue esta acción es alzarse como el portavoz de los musulmanes y hacer propaganda de la supuesta única verdad del Islam y no debería permitirse que continúen con ello». No obstante, a pesar de las fuertes reproches que ha recibido este reparto masivo, los políticos han resaltado en todo momento que no infringe ninguna ley.

Por el momento, la imprenta Ebner&Spiegel -encargada de la producción de los ejemplares del Corán- ha decidido detener su impresión hasta que analicen la situación, pero el proyecto se mantiene y este sábado están previstos un total de 38 ´puestos informativos´ en ciudades como Hamburgo, Berlín, Kiel, Lübeck y Darmstadt.