1270. 24 ele septiembre de 1942. "Despréndete más y más de las cosas de la Tierra. El
momento del Encuentro se acerca. Pronto nos veremos. . . Y, ¿qué pasó con Mis
Advertencias?" Yo me había desvanecido en la iglesia. "¿No te recuerdan las tres llamadas que se dan antes de que se levante el telón? Prepárate con alegre cuidado a la aparición sobre el otro escenario.
Ejercítate en la impaciencia del amor que va finalmente a poseer el objeto de su sueño; el más bello sueño que puedas tener, segura de encontrarlo superado. Yo escucharé tus llamados, aceptaré tus últimos sacrificios. Oiré tus deseos de unión; como la música de la obertura en la cual se resume todo el drama; porque todos los momentos de tu vida pueden ser presentados con renovado ardor en los últimos momentos. Nuestra primera entrevista será realmente ¡la Divina Comedia! ¿No vale la pena que te prepares con los ejercicios del más delicado amor?
" ¡Ah! ¡Cuánto Me agrada un alma, desde el momento en que piensa en agradarme! El alma que tiene la coquetería de salir del cuerpo... Y Yo sabré bien mirarla con la mirada que ella haya deseado verme.
"De ahora en adelante, quiero que tus comuniones se consagren a pedirme que Yo repare tu
pasado. Yo Me ensancho en vuestras comuniones, sobre cada una de vuestras facultades, en
vuestra sangre misma y os reparo según vuestro deseo. Sigo siendo el Hermano que os ha
salvado. Mi Amor no se detiene nunca y Yo nunca vengo sin obrar, Yo que Soy el Acto Simple.
Entonces agradéceme lo que hago por ti y entrégate con inmenso deseo de que nada en ti escape a Mi Abrazo. Ruega, apoyada en Mi Corazón. Dime: ‘Amor querido, dame para poder dártelo yo, un pecador cada día'."
Gabriela Bossis (1874-1950) fue la menor de cuatro hijos en una familia católica francesa que la educó cristianamente. Se diplomó en enfermería y sirvió como tal en las misiones de Camerún, por lo que fue condecorada. Fue una persona abierta y comunicativa muy entregada a Cristo, pero que no sintió la vocación religiosa. En 1923 escribió su primera comedia, alcanzó celebridad por obras entretenidas y edificantes que se estrenaron en numerosos países, incluso interpretando ella algún papel. En 1936 comenzó a transcribir sus diálogos con el Señor, una experiencia mística que vivió durante años. Fue dirigida espiritualmente por varios sacerdotes, que dieron luego testimonio de su paz interior. En uno de sus cuadernos escribe las siguientes palabras que escuchó de Cristo: "Tú has estado siempre bajo mi dirección". Todos esos escritos se agruparon en volúmenes agrupados bajo el título Él y yo. Murió después de experimentar durante varios meses dolencias respiratorias y pérdida de visión, que sobrellevó con el mismo espíritu de conformidad con la voluntad de Dios que guió toda su vida.