236- 10 de agosto. Lyon. "Para ser santos es preciso ante todo querer serlo. Vosotros todos no nacéis sino para la santidad."
237. 12 de agosto. En l'Ardèche. Yo: "¿Cómo es posible que desciendas hasta este poco de vino que hay en el cáliz?" El: “Con inmensa Alegria.”
238. 14 de agosto. En la Basílica de San Francisco Regis vi el senderito estrecho y arriscado de la santidad y a la Madre del Amor Hermoso ayudando a subirlo.