1427. 15 de febrero. Hora Santa.
Con suma delicadeza me dijo: ¿No te molesta mucho? Yo espero como una fiesta esta hora que Me vas a dar. El que ofrece un banquete se goza de él con anticipación. Y las invitaciones que Me hacen Mis creaturas Me causan alegrías muy grandes, porque es tan raro que Me inviten...
Habrás observado que hay personas en las cuales no se piensa cuando se hace una invitación a otras. Ellas se enteran desde lejos y como por accidente, de que hubo un festín. Son personas extrañas, o cuando menos, no se las estima lo suficiente como para invitarlas. Yo siento con frecuencia que Soy uno de esos... Por eso, cuando en medio de tus ocupaciones piensas un día en ir a ver a tus amigos, Me vienen ganas de darte las gracias y preguntarte: ¿Puedo venir también Yo?
Entonces Le dije: Por favor, conmigo, Señor, Tu estás siempre en Tu casa.
El: Es preciso que Me lo digas muy a menudo. Mi Corazón es friolento. Dale a tu, Señor y tu Dios un poco de calor.
¡Pequeña creatura Mía! Explícame bien el deseo que tienes de Mí. Yo lo haré crecer. Y aun en el caso de que no tuvieras ningún deseo de Mí, dímelo con simplicidad y Yo te lo daré. Y mucho más todavía. Te daré la sed de dejar la Tierra para encontrarme.
Dime que quieres poseerme y ser poseída por Mí; reanima tu amor en un trabajo de todos los días. Ten valor para volver a tomar el valor que tuviste el día anterior. Y bien sabes que te ayudo. Dime que lo sabes. Estos pequeños actos de Fe y de confianza son Mi dicha. Me gusta que sepas reconocerme y decir con los ojos vendados; '¡Es El!
Esta es la tarea que tienes sobre la Tierra.. .
Enseña a los otros para que aprendan a amarme. Pídeles que Me amen. Yo rara vez pido, prefiero esperar. Tú conviértete en apóstol Mío y tráemelos a todos. Diles que den algunos pasos y que Yo haré el resto. . .
Gabriela Bossis (1874-1950) fue la menor de cuatro hijos en una familia católica francesa que la educó cristianamente. Se diplomó en enfermería y sirvió como tal en las misiones de Camerún, por lo que fue condecorada. Fue una persona abierta y comunicativa muy entregada a Cristo, pero que no sintió la vocación religiosa. En 1923 escribió su primera comedia, alcanzó celebridad por obras entretenidas y edificantes que se estrenaron en numerosos países, incluso interpretando ella algún papel. En 1936 comenzó a transcribir sus diálogos con el Señor, una experiencia mística que vivió durante años. Fue dirigida espiritualmente por varios sacerdotes, que dieron luego testimonio de su paz interior. En uno de sus cuadernos escribe las siguientes palabras que escuchó de Cristo: "Tú has estado siempre bajo mi dirección". Todos esos escritos se agruparon en volúmenes agrupados bajo el título Él y yo. Murió después de experimentar durante varios meses dolencias respiratorias y pérdida de visión, que sobrellevó con el mismo espíritu de conformidad con la voluntad de Dios que guió toda su vida.